La economía y las víctimas de la crisis marcaron la primera jornada de la campaña de EH Bildu, con un acto contra los desahucios por la mañana y un mitin vespertino en una localidad muy castigada por el paro: Sestao. En ambos intervino Oskar Matute, candidato por Bizkaia y líder de Alternatiba.

A mediodía, ante la sede de Kutxabank situada en la Gran Vía de Bilbo junto a la Diputación de Bizkaia, Matute expresó un compromiso muy tajante: «Con EH Bildu no se producirá ni un desahucio más. Ni un ciudadano se quedará en la calle por culpa de la voracidad de los mercados y de los bancos, y del papel sumiso y silente de las instituciones públicas».

En el lugar comparecieron también Maribi Ugarteburu y Dani Maeztu, igualmente candidatos, y Mikel Santiago, que sería consejero de Justicia Social en un gobierno liderado por Laura Mintegi. Matute aportó datos escalofriantes: «Son catorce los desahucios que se producen día a día. Algunos de estos los lleva a cabo una entidad como Kutxabank, que mientras se jacta de ser solvente sigue dejando en la calle a ciudadanos y ciudadanas vascas», explicó.

«Nosotros no vamos a permitir que esta situación se siga produciendo, no vamos a permitir que las instituciones sigan mirando para otro lado mientras estas personas pierden su vivienda», prosiguió Matute.

Dejarlas en suspenso

Para ello anunció medidas concretas: «Si llegamos al Gobierno Vasco pondremos en pie una nueva forma de tratar esta dolorosa realidad. Pondremos en marcha un Instituto de la Vivienda, una entidad púbica que se haga cargo de las viviendas que las personas no puedan pagar por el elevado coste de la hipoteca, abusiva en la mayoría de los casos, y que sea esta entidad la que pase a ser propietaria de la vivienda, manteniendo a dichas personas en la vivienda con un alquiler social que nunca supere el 15% del total de sus ingresos. Solo cuando dicha familia pueda recuperar el umbral de recursos del que antes disponían volverá a retomarse la hipoteca, que quedaría por tanto en suspenso mientras las personas atraviesen dificultades», concluyó.

Ya por la tarde, en Sestao, la candidata a lehendakari, Laura MIntegi, se preguntó a sí misma «a qué se debe tanta agresividad contra EH Bildu» por parte de otras candidaturas, como PSOE y PP que la vetan expresamente para pactos. Se respondió que «se debe a que somos la única fuerza política que defiende los derechos sociales de la ciudadanía; los únicos que planteamos y ya estamos desarrollando otro modelo de hacer política, basado en la justicia social».

Por su parte, Matute hizo hincapié en que «por primera vez la izquierda soberanista de este país tiene la fuerza y la mayoría social necesaria para cambiar las cosas, y para desbancar de sus poltronas a los que nos han llevado a esta situación, a los que han provocado que Ezkerraldea sea el eskualde con más parados de Euskal Herria». Dicho esto, aseguró que «vamos a transformar Ezkerraldea. Nuestro modelo: recortar en privilegios, invertir en derechos sociales y sistema público. Superar el modelo comercial fracasado. Priorizar la sanidad, la educación y los derechos sociales a los proyectos faraónicos inviables».