El escrutinio de los votos de los llamados «residentes permanentemente en el extranjero» (muchos de ellos en Ipar Euskal Herria) se realizó ayer en las juntas electorales de los tres herrialdes y no varió el reparto de escaños en el Parlamento de Gasteiz, que estará compuesto por 27 parlamentarios del PNV, 21 de EH Bildu, 16 del PSE, 10 del PP y uno de UPyD. La mayor incógnita, casi la única, estribaba en si el PNV lograría levantar os cerca de 500 votos que le sacó el domingo EH Bildu en la circunscripción de Gipuzkoa, con lo que le habría quitado la primera plaza si bien sin modificar el reparto de escaños (ambos tienen nueve). Las expectativas jelkides no se cumplieron, sino que ocurrió justo lo contrario: EH Bildu sacó también más votos que el PNV en este bloque de votos.

En Gipuzkoa, el recuento del «voto del extranjero» aportó 636 sufragios más a EH Bildu, 471 al PNV, 365 al PSE, 201 al PP, 70 a Ezker Anitza-IU, 50 a UPyD, 35 a Equo y 19 a Ezker Batua. De esta forma, los resultados definitivos en el herrialde son 115.086 votos para EH Bildu y 114.446 para el PNV.

Por lo que respecta a Araba, el recuento de ayer dio 98 sufragios al PNV, 91 al PSE, 71 a EH Bildu, 71 al PP, 13 a Equo, 12 a UPyD, 9 a Ezker Anitza-IU y 4 a Ezker Batua. Como se comprueba, el número era muy reducido.

En cuanto a Bizkaia, el escrutinio otorga 571 papeletas más al PNV, 335 al PSE, 300 a EH Bildu, 270 al PP, 59 a UPyD, 47 a Ezker Anitza-IU, 22 a Equo y 18 a Ezker Batua. Los totales finales aparecen en el cuadro adjunto.

Tras el recuento de ayer, a partir de mañana se podrían ya remitir las certificaciones y las credenciales a los parlamentarios electos, según los plazos establecidos por La Junta Electoral de la CAV. Con ello, podrán comenzar a acreditarse en la Cámara y se pondrá en marcha el proceso de constitución del nuevo Parlamento. Habitualmente, esto ha ocurrido en torno a un mes después de los comicios.

Se espera que para principios de diciembre pueda producirse la jura del lehendakari y que se conforme el Gobierno antes de mediados de ese mes. La prioridad sería la de elaborar unos presupuestos, por lo que tendría que habilitarse el Parlamento en el mes de enero para poder trabajar en ello, con el fin de que se puedan aprobar antes de Semana Santa.