Preparando la visita del Betis
Una semana cargada de trabajo deja sus consecuencias negativas
Elustondo e Iñigo Martínez se lesionaron ayer, mientras que Chory Castro y Asier Illarramendi aún no se ejercitan con sus compañeros.
Imanol CARRILLO
Parece que Philippe Montanier no quiere ningún tipo de relajación en la semana que visita Anoeta el Betis, uno de esos denominado rival directo. Y eso se está notando estos días en Zubieta, donde la carga de trabajo se está acumulando quizás algo más de lo debido. Las consecuencias son claras: cuatro jugadores blanquiazules se encuentran con molestias físicas.
Según el parte médico facilitado ayer por la Real, Gorka Elustondo, Iñigo Martínez, Chory Castro y Asier Illarramendi sufren diversos problemas, aunque los dos últimos podrían estar disponibles para recibir el domingo al conjunto andaluz.
Después de haber disfrutado de dos días de descanso tras el triunfo en San Mamés, el técnico normando diseñó una semana cargada de trabajo. El lunes la jornada se dividió en dos partes, sobre el césped y en el gimnasio. A esta cita faltó Iñigo Martínez al encontrarse enfermo. Al día siguiente se confeccionó una doble sesión que no pudieron completar ni Chory Castro ni el mutrikuarra Asier Illarramendi. Además, ambos jugadores tampoco completaron la del miércoles, y en la de ayer realizaron tratamiento de fisioterapia.
Aunque la peor parte se la llevaron Gorka Elustondo e Iñigo Martínez. El primero se retiró de la sesión por culpa de un tirón muscular en el sóleo de la pierna derecha y hoy se sabrá el alcance de la lesión, mientras que el ondarroarra sufre «una contusión en la musculatura perónea de la pierna derecha».
Para hoy a las 12.00 se ha diseñado una sesión suave, que se desarrollará en el interior de las instalaciones de Zubieta, aunque no se descarta que, de forma opcional, varios futbolistas txuriurdines salten al césped para continuar con su trabajo.
Illarramendi, optimista
Para alentar a la afición, el propio Illarramendi señaló que «tengo un poco de molestias pero las puedo aguantar. Ya mañana (hoy) haré más cosas y para el fin de semana estaré bien».
Respecto al partido de este domingo, el medio centro indicó que será complicado «recuperar el golaverage, porque allí perdimos 2-0. Ganar por dos goles o más será difícil. Yo me conformo con ganarles, así que lo importante son los tres puntos».
Por su parte, Alberto de la Bella también recordó que en el Benito Villamarín «no se jugó un buen partido, pero ahora el equipo está en otra fase donde ha crecido mucho, donde lleva una dinámica tremenda de resultados, de victorias y de empates, y tenemos que aprovecharlo. Es un rival directo, que le podemos sacar bastantes puntos de ventaja. El equipo está mentalizado para ello».
El lateral izquierdo comentó además que «la Real está de dulce ahora mismo porque los números lo dicen así. Después de unos años malos en Segunda, ha encontrado una estabilidad y un proyecto ilusionante».
Y no solo en lo colectivo. «Estoy muy satisfecho, jugando todo, con la confianza del míster y sin lesiones, que es lo más importante. Creo que estoy en el mejor momento y ojalá siga mucho tiempo», recalcó.
Sin embargo, para conseguir el objetivo europeo, Alberto de la Bella cree que hay que tener «los pies en el suelo». Y es que «la competitividad es inmensa y la Real lo tiene que hacer muy bien si quiere estar en Europa el año que viene». Que así sea.
Dani Estrada y José Ángel, en nombre de la Real Sociedad, participaron ayer en la presentación de Agaer-Egge, una asociación sin ánimo de lucro que persigue promover y desarrollar, a nivel individual y social, la lucha contra las enfermedades reumáticas.
Pepe Mel, técnico del Betis y próxim0 rival de la Real, estaba ayer de enhorabuena. El madrileño cumplió 50 años en un momento dulce para la afición andaluza. Y es que mantiene a su equipo de toda la vida en una excelente posición clasificatoria (séptima), aunque mejorable si consiguiese ganar el domingo al equipo donostiarra.
El club verdiblanco ofrecía ayer una extensa y recomendable entrevista al preparador en su página web. En ella se detalla toda la trayectoria de Mel, como futbolista y como entrenador, contada en primera persona. Así, a la hora de preguntarle por un título para su medio siglo de vida y para su carrera en los banquillos de fútbol, señaló lo siguiente: «El título para definir mi vida sería `50 años feliz'. Sin duda alguna, no tengo nada de lo que lamentarme. La vida no me ha golpeado muy duro, salvo que he perdido a mis dos padres, pero son cosas naturales de la vida. `Progresa adecuadamente' sería el nombre del libro sobre mi carrera como entrenador. Llevo entrenando 13 años. Llegué pronto a Primera División, me fue mal y me ha costado volver. Gracias a Dios he vuelto con el club de mi vida. Si soy capaz de seguir entrenando a este equipo y estar en Europa, sí que seré feliz».
De hecho, Pepe Mel no se cansa de unir Europa y Betis: «Para mí es una frustración. Lo que siempre quise ser fue un buen futbolista. Tuve años buenos en el Betis. Por mis cualidades o porque cogí un Betis que no era muy potente, no lo pude saborear como yo hubiera querido. Me hubiera gustado participar mucho más como futbolista. Es el futbolista quien se divierte. Ya que no lo pude hacer así, mi sueño es poder jugar en Europa con el Betis siendo entrenador».
De cara a ese objetivo, el equipo andaluz disputó ayer un partido amistoso contra el de División de Honor. El técnico dio minutos a toda su plantilla. I. C.
