La presentación de candidaturas para el Congreso de UPN se cierra esta tarde. Ayer, Alberto Catalán mantuvo el discurso de que el entendimiento es posible, pero ya sin apenas hacer énfasis en esa posibilidad. «Mientras hay vida, hay esperanza», dijo. No obstante, su decisión de pelear por la Presidencia del partido es firme y ya no se postula como un mero candidato, sino como un proyecto «con gente ilusionada y apasionada por UPN y por Navarra, que es lo más importante por encima de los partidos y las personas».

De nuevo, Catalán aprovechó un receso del pleno del Parlamento, del que es presidente, para hacer campaña de cara a la decisiva cita del 17 de marzo. «Del Congreso tiene que salir un partido con ilusiones renovadas, con ganas de mirar al futuro, con pasión y con ilusión», afirmó.

Por el momento, Catalán se refiere a su proyecto para dirigir el partido con términos vagos. Aunque se le considera el líder de la corriente pactista con el PSN, no habla públicamente de sus diferencias estratégicas con Barcina. Es más, se refiere a ellas como un mero «debate interno». A su juicio, la imagen que está dando el partido en esta pugna por el poder no ha sido «lo más aleccionador» y este argumento le vale para no adelantar cuáles serían las decisiones que tomaría de hacerse con el control de la formación.

Los otros dos candidatos

UPN se renueva por completo en el Congreso, donde se revisarán incluso los estatutos de la formación. De ahí también ha de salir la nueva Ejecutiva. A día de hoy, Catalán es quien más apoyos tiene dentro de este organismo. Como es lógico, los puestos clave para la próxima etapa son los de Presidencia, Secretaría General y Vicepresidencia.

Del lado de Catalán, la senadora Amelia Salanueva es la aspirante a secretaria general. El rival de Salanueva es el alcalde de Noain, Óscar Arizcuren, que cuenta con el respaldo de Barcina. Ayer, el presidente del Parlamento prefirió no atacar a Arizcuren, un desconocido fuera del partido. «Todo el mundo puede presentarse, sin necesidad de avales», subrayó Catalán, a quien le parece «bien» que Arizcuren aspire al cargo.

La tercera figura, la del vicepresidente, es la que aún no se ha desvelado. No obstante, hoy se verá si hay dos aspirantes a vicepresidente o intentarán alcanzar un consenso.