«Arraianos» nos descubre el premiado cine fronterizo del gallego Eloy Enciso
M. I. | DONOSTIA
El segundo largometraje del gallego Eloy Enciso ha sido aclamado por la crítica en el Festival de Locarno, llevándose el premio de Nuevas Olas en el de Sevilla y el de Vanguardia en el BACIFI argentino. Su ópera prima «Pic-Nic» era más estrictamente contemplativa o naturalista, pero con «Arraianos» ha querido experimentar las posibilidades de la palabra a la manera de Jean-Marie Straub y Danièle Huillet en «Sicilia!».
La técnica consiste en hacer recitar a personajes reales de un entorno rural textos que no les pertenecen, en este caso extraídos de la obra «O bosque» del dramaturgo Jenaro Marinhas del Valle, comparable a la de Fernando Pessoa. Se busca con ella la musicalidad del idioma gallego, más allá del contenido del monólogo.
Curiosamente, se cuela también una referencia al clásico de Minelli «Brigadoon», debido a que la película se sitúa en Couto Mixto, un lugar perdido de la frontera entre Galicia y Portugal, que fue históricamente una tierra de nadie con su régimen y privilegios propios. Enciso explora la dimensión mítica de una población que parece suspendida en el tiempo, y donde la realidad y el sueño se confunden entre los cánticos tradicionales.
Dirección: Eloy Enciso.
Intérpretes: Celsa Araujo, Antonio Ferreira, Aurora Salgado, Eulalia González. País: Galicia-Portugal. 2012.