Dos exfuncionarios judiciales, una sicóloga y dos administradores del Pequeño Hogar de Belén fueron detenidos el martes acusados de la apropiación el 14 de marzo de 1977 de los hermanos Alejandro, María Ester y Carlos Ramírez, de 2, 4 y 5 años tras un operativo del Ejército en la vivienda en la que residían junto a su madre, quien murió. Su padre, en prisión desde 1974, pidió la devolución de los niños, solicitud que fue rechazada por la jueza Delia Pons y hasta por la Suprema Corte bonaerense. El 29 de julio de 1983, la Corte Suprema de Justicia de la Nación autorizó el reencuentro familiar. Mientras estuvieron en el centro de menores, los tres sufrieron malos tratos, amenazas, y abusos sexuales. La Fiscalía consideró que «el accionar de los responsables del Tribunal de Menores pone de manifiesto su identificación con el plan de persecución» de la dictadura.