GASTEIZ
El acuerdo alcanzado entre el Gobierno de Lakua y el PSE para sacar adelante la llamada ley del agua ha sido duramente criticada por Batasuna, por considerar que se trata de «un acuerdo muy peligroso, que a través de la constitución de la Agencia Vasca del Agua abre las puertas a la privatización de su gestión».
A juicio de Batasuna, este acuerdo, «a través de la creación de esta Agencia como Institución Pública de Derecho Privado, es un intento de introducir la gestión privada en un recurso natural fundamental que tiene que estar fuera de cualquier afán de negocio y que tiene que seguir siendo un servicio público y universal al alcance de toda la población».
Al mismo tiempo, denuncia el «intento de centralización de la gestión del agua que se esconde detrás de esta proposición de ley, atacando directamente a los criterios actuales de descentralización mu- nicipal y foral de la gestión del agua».
Por el contrario, Batasuna apuesta por los principios de «la cercanía y la subsidiariedad, dejando la gestión del agua en manos de las entidades institucionales más cercanas a la ciudadanía».
Además, enmarca «este nuevo acuerdo estratégico como otro paso más dentro de la apuesta estratégica que están poniendo en marcha el PNV y el PSE para seguir gobernando la autonomía al servicio de sus intereses partidistas y de sus negocios, por encima de las necesidades de la mayoría de la sociedad».
