DONOSTIA
La prioridad de Batasuna y del conjunto de la izquierda abertzale en el actual escenario es conformar la mesa de resolución del conflicto político. Volvió a destacarlo ayer en Donostia en un desayuno con la pren- sa y en una posterior rueda de prensa, donde repasó los acontecimientos de las últimas semanas y ofreció su valoración sobre los mismos.Arnaldo Otegi fue el encargado de exponer el análisis de su formación, en su primera comparecencia ante los medios desde que saliera de prisión el pasado viernes. Acompañado de Marije Fullaondo, Pernando Barrena y Joseba Permach, el mahaikide, tras advertir que «la izquierda abertzale hace análisis sobre hechos y no sobre declaraciones o poses», desgranó los «aspectos positivos y negativos» que Batasuna observa en la actual situación.
Entre los primeros, enumeró el alto el fuego permanente de ETA, «una aportación al proceso y una muestra de la voluntad» de la organización armada; la multitudinaria manifestación del día 1 en Bilbo, «que reflejó cuál es el nudo del conflicto: que los estados no tienen un problema con la izquierda abertzale o con determinadas organizaciones, sino con este pueblo, que reclama su derecho a decidir»;la declaración de Ahotsak, «que recoge las bases de lo que tendrían que ser los principios rectores para la constitución de una mesa de resolución»; el Acuerdo Democrático de Base, «sobre el cual se seguirá trabajando»;y las reacciones habidas en el ámbito internacional, «ya que la aporta- ción europea e internacional será importante para hacer irreversible el proceso».
Reiteración del «delito»
Entre los aspectos negativos, hizo hincapié en que los estados español y francés «siguen manteniendo las estrategias del pasado». Concretamente, se refirió a las actuaciones contra su formación y la izquierda abertzale, y resaltó que «desde hace tres semanas, desde el anuncio del alto el fuego, esas agresiones han aumentado: citaciones de la Audiencia Nacional, encarcelamientos, prohibición del acto del Kursaal... Dicen que la izquierda abertzale es necesaria para la solución, pero los ataques no cesan. ¿Pero con quién pretenden desarrollar el proceso y resolver el conflicto? ¿Con Imaz? Puede ser, pero eso no será solucionar el conflicto».Tras afirmar que «si el proceso se desarrolla como debe, cada vez deberían prevalecer más los aspectos positivos sobre los negativos», advirtió de que «si el Estado no respeta a la izquierda abertzale, no puede haber proceso».
Aún dijo más Otegi:«No hay proceso si no reiteramos en el delito convocando ruedas de prensa y actos; pero no por hacer desafíos al Estado, sino porque tenemos la responsabilidad de expresar a la opinión pública nuestro criterio respecto a la situación y de participar en el debate político. Porque ahora, parece que la izquierda abertzale no puede hacer nada; ni siquiera sabemos si por esta rueda de prensa tendremos que ir el lunes a la Audiencia Nacional».
El dirigente independentista expresó su decepción por esta situación y añadió que esos hechos han provocado que Batasuna haya perdido «buena parte de la confianza» que había al- canzado con el PSE no obstante, mostró su «reconocimiento» a los miembros de ese partido con los que han hablado en los últimos cinco años «en las duras y en las maduras». Y es que, a su juicio, en una coyuntura como la actual hay cuestiones evidentes, «que se sobreentienden, como que los interlocu- tores no pueden ser atacados. Es el abc. ¿Alguien se imagina que en Irlanda encarcelaran a Martin McGuinness o a Gerry Adams? ¿O que ilegalizaran a Sinn Féin? No sería serio».
«Habrá que hacer cosas para generarla [la confianza] otra vez», apuntó, aunque dejó claro que «la pelota no está en el tejado de la izquierda abertzale».
La verificación de Batasuna
Otegi aseguró que la izquierda independentista «ha puesto todo para que el proceso fructifique al cien por cien» y para que esta vez «sea la buena». Y su prioridad, añadió, es «conformar la mesa para la resolución del conflicto»; un foro para cuya constitución «hay que poner desde ya las bases sólidas, ya que hay condiciones para ello».No obstante, agregó que para la configuración de esa mesa para la solución «la izquierda abertzale debe tener garantizados todos sus derechos civiles y políticos, porque si no algunos jugarán con ventaja».
Pero ése es un escenario al que «algunos agentes tienen vértigo. Les da miedo hablar de política con mayúsculas y plantear su punto de vista y proyecto para el futuro de este país, porque ahí cada uno debe retratarse. El retraso en la conformación de la mesa tiene que ver con la debilidad de las posiciones de esos agentes». Preguntado sobre a quiénes se refería, citó a PNV, PSOE y «evi- dentemente PP, que no quiere ni acercarse a esa mesa, porque su propuesta es guerra».
El mahaikide explicó que Batasuna también quiere hacer su verificación particular:«A la izquierda abertzale se le pregunta constantemente si está dispuesta a defender su proyecto por vías políticas y democráticas. Nosotros respondemos que sí, que lo hacemos ahora y hace 30 años. Y lo que nosotros queremos saber es si hay vías políticas y democráticas para materializar nuestro proyecto. Queremos verificar si el Estado español está dispuesto a aceptar con deportividad lo que decida la ciudadanía vasca, incluso si la mayoría del pueblo vasco decide reunificarse en un estado independiente. Si así fuera, el conflicto estaría superado definitivamente».
Preguntado por los periodistas sobre las próximas elecciones de 2007 y su esperanza de participar en ellas, Otegi señaló que «de un forma u otra, estaremos en ellas», a lo que Barrena añadió que en la medida en que el proceso avance hacia un acuerdo político «es impensable» que la izquierda abertzale no pueda presentarse a esos comicios legalmente. «De lo contrario, será muy mala señal».
Otegi apostilló que su formación no entiende que el Gobierno español pueda llegar a reunirse con ETA y que el PSOE no lo haga con Batasuna, «al menos públicamente, porque no es legal. Eso es tanto como premiar la práctica de la lucha armada. Esa es la paradoja».
M. J.
DONOSTIA
Además de las actuaciones judiciales contra la izquierda abertzale, Batasuna observa más factores negativos en la actual coyuntura política. Es el caso, según destacó Otegi, del «incremento de la presencia de las fuerzas armadas españolas en Euskal Herria en forma de controles».
Pero, sobre todo, se refirió a la actuación de la Ertzaintza, «que merece un capítulo especial». Rememoró, en primer lugar, los acontecimientos acaecidos en Santurtzi y Portugalete a raíz de la muerte de Igor Angulo y Roberto Sainz. «Y tras el alto el fuego, practica dos detenciones después de tres años sin detener a nadie. Además, entra en asambleas locales diciendo que son ilegales, filma manifestaciones, hace seguimientos, lo envía todo a la Audiencia Nacional... Y eso lo hace porque lo manda el Gobierno, Balza, Ibarretxe», denunció el mahaikide, y se preguntó si «ésa es la aportación del PNV a la oportunidad que se ha abierto». Todo ello evidencia, a su juicio, «el nerviosismo y la debilidad» de los jeltzales, «cuyo objetivo es mantener el negocio».