PANATHINAIKOS 71
TAU BASKONIA
74
GASTEIZ
¿Quién dijo miedo? El carácter Baskonia se elevó ayer por encima del Olimpo de los Dioses para lograr su victoria más difícil y conseguir su segunda participación en la Final Four de Praga. Como en la mejor epopeya griega, los gasteiztarras tuvieron en contra el escenario nunca habían vencido en un OAKA ayer abarrotado y con un ambiente infernal, los más duros rivales el Panathinaikos tiene posiblemente la plantilla más completa de Europa y hasta los elementos se conjuraron en su contra con un arbitraje que, aunque menos fiero de lo que pintaban, no ayudó en exceso. Sin embargo, fiel a su propia historia, el equipo gasteiztarra se creció ante todas las adversidades y, con un partido que rozó la perfección; superioridad en el rebote, gran porcentaje en el tiro exterior y muchas ganas e inteligencia en los minutos finales, dejaron helado el infierno griego.Lejos de amedrantarse, el Baskonia, comenzó con muy buenas sensaciones. Muy metidos en defensa, tanto en individual como en zona, el Pao buscó forzar la máquina dentro, tanto para cargar de faltas a los interiores baskonistas como para eclipsar sus malos porcentajes desde fuera. Ante esto, el equipo gasteiztarra apostó por un juego muy dinámico que le dio el control del ritmo de juego, amparado en su superioridad en el rebote, aunque Panathinaikos le sorprendió algo en ofensivo al principio.
Ni siquiera las rápidas segundas faltas de Scola y Splitter Perasovic apostó entonces por la zona pararon el brío baskonista que le llevó con siete puntos de ventaja en el primer cuarto (14-21).
El juego se embarulló mucho en un segundo cuarto con los dos escoltas suplentes como grandes protagonistas. Un triple de Erdogan abrió la brecha a diez, pero Obradovic pronto encontró en Spanoulis, su mejor jugador de la serie, el revulsivo perfecto con sus penetraciones y su tiro exterior, bien acompañado por Alvertis.
El equipo griego, siguió cobrándose faltas y la segunda personal de Prigioni a falta de 5.40 para el final del segundo cuarto pareció el punto de inflexión que buscaban los del trébol para coger el mando del partido. Sin embargo, pese a que lograron ponerse a dos varias veces, con Ukic de organizador pero con Erdogan al mando de las operaciones, el Baskonia dio un nuevo arreón, logrando escaparse por 6 puntos (36-42), al descanso. La superioridad baskonista en el rebote 20-9, atenuó algo la acumulación de personales en los hombres importantes del equipo vasco.
Problemas de faltas
Sin embargo, el peaje gordo lo pagó en el tercer cuarto. En la reanudación, los de Obradovic endurecieron mucho su defensa, pero sin embargo fue el Baskonia el que se cargó de faltas en sus jugadores más importantes como Prigioni le pitaron una inexistente en ataque Scola y Splitter. Esto mermó algo la intensidad defensiva y descentró algo el ataque, conducido nuevamente por Ukic. Tres ataques fallidos consecutivos permitieron al Pao acercarse muchísimo en el luminoso, aunque le costó empatar el partido, lo que lograron en el 59-59. Erdogan volvió a tirar del equipo con otro triple de ocho metros, sin embargo, Alvertis respondió y el equipo de Obradovic logró ponerse por primera vez delante con un tiro libre de Tomasevic después de cobrarse la cuarta falta de Tiago Splitter otra en ataque.Perasovic llevaba toda la serie exigiendo la aportación de todos los jugadores del plantel y «los otros» respondieron en los momentos más decisivos. Con el intimidador brasileño en el banquillo, surgió el mejor Kornel David, intensísimo en defensa y multiplicado en tareas reboteadores.
En ataque, el turno fue para los dos mormones, discretitos hasta entonces pero que con dos triples casi consecutivos, volvieron a devolver la iniciativa, que ya no volverían a perder en el último cuarto.
La cuarta falta de Scola a falta de 5.22 supuso otro obstáculo en el ya minado camino del Baskonia a Praga, pero la zona volvió a surtir efecto. Prigioni, con un triple, se unió a la lista de enrachados y David dio seis puntos de ventaja que parecían definitivos.
La diferencia mermó a su vez con el cronómetro y Spanoulis volvió minimizar la diferencia a falta de un minuto. Los peores fantasmas surgieron en otro final agónico con un tapón, cuando menos dudoso sobre Jacobsen en una entrada. No obstante, el Baskonia no había trabajado tanto para nada y Prigioni asestó otro duro golpe con un robo a falta de 49 segundos.
Erdogan no falló desde el tiro libre y Lakovic respondió en el último suspiro ateniense con un 2+1 que se cobró la quinta de Kornel David. Prigioni, con otra canasta imposible llevó el marcador a 69-70 y Lakovic falló un tiro libre para el 70-72, algo que no hizo Erdogan, al que no le falló el pulso para meter los dos. Ni siquiera la última artimaña que les dio la opción de jugarse el triple de la prórroga tras el fallo voluntario de Diamantidis en la última cita con los tiros libres descentró al Baskonia ante su penúltima gran victoria.
Se enfrentará al ganador del Maccabi-Olympiacos
Hoy se conocerá la composición definitiva de la Final Four de Praga, con la disputa de los partidos de desempate de las eliminatorias entre el Maccabi de Tel Aviv-Olympiacos de donde saldrá el rival del Tau en semifinales y el Barcelona-Real Madrid. El vigente campeón tratará de hacer valer el factor cancha, donde venció 87-78 al equipo griego, que ganó en Atenas 76-70. El duelo ACB está más igualado de lo esperado. -