DONOSTIA
Si Bakero ha repetido desde que asumió la dirección del primer equipo que cada partido debe ser considerado por sus jugadores como una final, el de hoy merece como ninguno ese calificativo porque será definitivo en el caso de ganar. Un empate bastaría para que el Cádiz no pueda superar ya a los blanquiazules, pero no se puede especular con este resultado y la Real debe salir como en Villarreal con la misma decisión para obtener el triunfo.
Bakero, que dirigió la última sesión de entrenamiento ayer en Cádiz sin novedades, alineará previsiblemente el mismo once que en las últimas salidas con la única variación de la entrada obligada de Cifu por el sancionado Aitor. La presencia de Mikel Alonso cerca de Garitano y de Alvaro Novo desde el inicio debe darle la fuerza en el centro del campo que le faltó a la Real ante el Sevilla.
Se espera hoy un partido especialmente disputado porque el Cádiz lo plantea como su última oportunidad. Sólo le vale ganar y la Real debe jugar con esa mayor necesidad que no debe traducirse en una mejor motivación. Los blanquiazules se juegan también mucho. Es importantísimo asegurar la permanencia hoy y marcarse después un segundo reto, despedir la temporada con la mejor imagen y el puesto más alto. Perder hoy devolvería al equipo a una situación límite de cara a la visita del domingo del Celta.
Un partido muy difícil
No será nada fácil ganar hoy porque el Cádiz llega en un buen momento a este partido decisivo. Llevaba tres partidos sin perder antes del jugado el sábado en el Camp Nou y ante el Barcelona pudo ampliar esa racha de no mediar una buena parada de Víctor Valdés en los últimos minutos.Los gaditanos afrontan el duelo con un día más de descanso y cuando les falte el aliento tendrán el apoyo de un Carranza que se llenará. Es el público que más apoya a su equipo y no le ha censurado nunca a pesar de los malos resultados cosechados, porque estar en Primera tras doce años en Segunda y Segunda B se ha vivido como una fiesta.
El Cádiz destaca por su juego colectivo y, a falta de jugadores de gran calidad, sí cuenta con futbolistas como Pavoni, Lucas Lobos y Jonathan Sesma, que pueden crear peligro en el área realista. Además la grada apoya a sus jugadores en cada acción a balón parado, que se celebran como ocasiones de gol.
Defensivamente el equipo ha mejorado en los últimos partidos tras desaparecer del once por decisión técnica el portero Armando y por sus lesiones los centrales titulares Abraham Paz y De Quintana. Berizzo y De la Cuesta han dado un buen nivel en el centro de la defensa y no darán facilidades a un Skoubo que todavía no ha marcado lejos de Anoeta.
El Carranza es un campo que históricamente se le ha dado
mal a la Real. Es el único de Primera, junto al del recién llegado Getafe, en el
que no ha ganado nunca. Si no se puede vencer el empate es un muy buen resultado
y, de perder, la Real debería hacerlo por la mínima para mantener a su favor el
average en caso de empate final. En Anoeta ganó por 2-0 con goles de Gabilondo y
Xabi Prieto de penalti. De perder, el Cádiz quedaría a tres puntos y juega los
dos últimos partidos en Getafe y ante el Málaga, a los que ganó en la primera
vuelta y que no se juegan nada. Por eso, en Cádiz tienen muchas esperanzas de
salvarse de lograr un triunfo
hoy.
DONOSTIA
Cifu se perfila como el sustituto de Aitor esta noche. El lateral comentaba antes de salir hacia Cádiz que «el mister no ha dicho nada, pero estoy al 100% y quiero aportar algo al equipo. Estos son los partidos que a un jugador gusta jugar. Aunque todavía quedan otros dos, te juegas la temporada y estos partidos gusta jugarlos y ganarlos. Para nosotros es muy importante, pero el Cádiz sabe que si pierde no tiene nada que hacer. Nosotros tenemos ese margen de error que son las dos últimas jornadas, pero hay que ir a por todas».
El conoce el ambiente del Carranza y sabe lo que es ganar allí con el Eibar el año pasado en otro partido en el que estaba en juego una plaza en Primera: «El Cádiz en casa es un equipo difícil. Se juntan atrás y arriba tienen jugadores rápidos. Se basan más en los cuatro de arriba que en defender. Con el Eibar nos jugábamos estar entre los tres de arriba, el ambiente fue muy bueno. Los aficionados apoyan a su equipo al 100%, pero ganamos y espero repetir triunfo».