Mañana
será un gran día para Sara Varas, Leyre Aguirre, Xabier Mariño, Aurelio Edler y el crítico de GARA MikelChamizo. Firman las siete piezas que se estrenarán en Musikaste de Errenteria, festival que les dedica uno de los conciertos de su presente edición. Chamizo acudirá a esta importante cita con dos creaciones: ‘‘Sexteto’’ y ‘‘Monster’’. La primera es una obra para flauta, clarinete, fagot, violín, viola y violoncello; la segunda está escrita para arpa y electroacústica. «Me encargaron dos obras que representasen el trabajo que hacemos en Musikene, que no se limita a escribir para instrumentos, ya que también trabajamos con música electrónica, con formatos multimedia, con ordenadores». ‘‘Monster’’ es un reflejo de esta labor que cita Chamizo. Es una obra para arpa y electroacústica.
Explica el autor que, «en estas dos obras, lo que hago es jugar con tópicos establecidos con respecto a determinadas músicas». ‘‘Monster’’ pone el contrapunto a la idea que se tiene del arpa, como un instrumento ante todo delicado.
Chamizo se ha inspirado «en una caricatura de una clase de solfeo de cuando era pequeño. Había caricaturas de todos los instrumentos: el tuba salía gordísimo, los contrabajos parecían osos y la arpista era una chica guapísima, con el pelo largo, liso, envuelta en ropajes sedosos, en una posición grácil». ‘‘Monster’’ pone al descubierto las distintas posibilidades del arpa, «que tiene esa faceta delicada pero, al mismo tiempo, tiene un lado mucho más salvaje, en el sentido de que con el arpa se pueden hacer ruidos tremendos, se pueden producir unas sonoridades muy fuertes».
Chamizo ha escrito una obra para solista y música electrónica. Es música grabada manejada con un ordenador en interacción con el arpa.
‘‘Sexteto’’ es una reflexión del autor sobre «la música muy virtuosa de exhibición.Es, a la vez, un homenaje y una especie de crítica en torno a esta música, «que es muy espectacular dice, llena de gestos grandilocuentes, y que no es tan difícil como parece», comenta el colaborador de GARA. Chamizo muestra su fascinación por este tipo de música, a la vez que escepticismo.
Para ello crea un discurso muy espectacular e introduce elementos de crítica, «exagerando un poco los detalles, convirtiendo momentos en algo grosero». Mañana Ramón Lazkano dirigirá al sexteto que llevará a escena la partitura de Chamizo. Lazkano ha sido profesor de orquestación de Mikel Chamizo en Musikene.
El músico ya ha estrenado algunas composiciones. En 2003, junto a Sara Varas, un villancico para la JovenOrquesta deEuskadi. Ambos firmaron otra pieza que se escuchó en el Festival de Nuevas Tendencias de Gasteiz. En 2005, las Matinées de Miramón incluyeron otra obra suya para acordeón.
La sesión dedicada a la música contemporánea dentro de Misikaste tendrá lugar mañana a las 20.00, en el centro cultural Villa de Errenteria. El festival continuará hasta el día 20.
«Una labor ejemplar»
Chamizo considera que Musikaste es una cita «muy importante. A lo mejor no tiene el presupuesto de la Quincena Musical de Donostia o de otros festivales, como elMusika-Música, pero es muy importante dentro de las fronteras de Euskal Herria, porque es un festival que está orientado exclusivamente a la música vasca.Lo que les interesa es difundir la música de aquí: la que se ha hecho y la que se hace hoy en día», cuenta.
Para Chamizo el encuentro que organizan Eresbil y la coral Andra Mari «realiza una labor ejemplar, una labor que el resto de festivales sólo realiza de una manera muy parcial.La Quincena Musical muy de vez en cuando toca alguna obra de músicos vascos. Musikaste se dedica a ello; en ese aspecto, no tiene competencia». Musikaste tiene apartados muy variados. Las sesiones dedicadas a la música contemporánea son, en ocasiones, las que menor número de asistentes congregan. Preguntado acerca de los motivos, el crítico de GARA señala que «es una cuestión muy compleja. En gran parte se debe al desconocimiento, a prejuicios». «Hay muchísima gente continúa que no concibe que fuera del género de la canción, que es un género muy concreto dentro de la música, existe otro mundo».
Chamizo está a punto de licenciarse.A corto plazo, su
deseo es realizar un máster en Berlín. Asume que, «una vez fuera del
conservatorio, eres compositor y debes enfrentarte a la realidad. Es un mundo
difícil, hay que trabajar mucho, intentarlo y no decaer nunca». -