Caja Castilla La Mancha garantiza «trabajo para siete años» en Gamesa Aeronáutica
Los nuevos dueños de Gamesa Aeronáutica afirmaron ayer que cuentan con carga de trabajo para siete años y que se mantendrá la plantilla y sus actuales plantas de producción. Tanto Caja Castilla La Mancha como el que será nuevo presidente, Juan Ignacio López Gandásegui, recordaron los proyectos con los que actualmente cuenta en cartera la compañía y afirmaron que sus planes tienen vocación industrial y son «de altos vuelos». Gandásegui explicó que la nueva sociedad cambiará su nombre y mantendrá su sede en Gasteiz, pero dejó clara su identidad «nacional» española.
MADRID
La nueva empresa Gamesa Aeronáutica presentada ayer, tras su compra al grupo Gamesa por parte de un consorcio liderado por Caja Castilla La Mancha (CCM), cuenta con una «buena carga de trabajo para siete años», según el futuro presidente, Juan Ignacio López Gandásegui. López Gandásegui, ex consejero delegado del grupo Gamesa y que, tras abandonar el mismo, participa en la operación, presentó en Madrid la nueva compañía y afirmó que mantendrá su plantilla y sus actuales plantas de producción. Destacó que el objetivo de la nueva etapa es la de «profundizar en el liderazgo de la sociedad en el mercado español y a nivel internacional». Entre los proyectos en cartera, mencionó la estructura y fuselaje de los modelos 145-135 de la brasileña Embraer, un modelo cuyas alas se fabrican en Araba, pero que se encuentra ya encarando sus últimos pedidoso el CRJ 700-900 de la canadiense Bombardier, que se fabrica en Sevilla. Asimismo, también está en la participación de la estructura, fuselaje trasero y cobertura de motores, del helicóptero Sikorsky S-92. En cuanto a su colaboración con los grandes fabricantes, López Gandásegui indicó que para Airbus «estamos presentes en el A380 con la fabricación de la sección 19 y en el ala del A400M», y en cuanto a Boeing, «hemos sido contratados para diseñar la swing zone, parte más delicada en la transformación de aviones 747-400». Agregó que «estamos en la fabricación de componentes para todas las empresas aeronáuticas a nivel mundial».
Una empresa «nacional» La nueva empresa seguirá llamándose Gamesa Aeronáutica por el momento y tiene hasta el próximo 30 de noviembre como plazo para hacer efectivo un cambio en la marca corporativa, que será anunciado en las próximas semanas. López Gandásegui aseguró que su sede se mantendrá en Gasteiz, aunque quiso dejar claro que «no somos sólo una empresa vasca, sino nacional», en referencia a su implantación en el Estado español. En este sentido, no especificó en qué plantas se concentrará la carga de trabajo anunciada. De hecho, tras la venta, los nuevos gestores han asumido el plan Prega, que preveía recortes de empleo en Miñano para ajustar costes. «Todos tranquilos» Por su parte, el presidente de CCM, Juan Pedro Hernández Moltó, destacó que «hemos alcanzado el objetivo final tras largos meses de trabajo y tras superar un durísimo proceso de selección. Hoy nace una empresa que tiene un proyecto de altos vuelos, que se ha hecho con la base de un grupo solvente y que tiene una vocación industrial que va a ir aumentando en los próximos años».
Moltó quiso tranquilizar a sus socios indicándoles que «todo el mundo debe estar tranquilo, pues iniciamos un proceso llamado a tener éxito, gracias a la experiencia que tienen todos los que forman parte de la nueva sociedad». La empresa alcanzó los 313 millones en el 2005, y sus nuevos directivos esperan que esta cifra siga subiendo al cierre del 2006. La compra del 100% de la compañía a través de la Sociedad Vehículo Synergy Industry and Technology, ha supuesto un desembolso de 45 millones de euros, aportados por un consorcio encabezado por CCM. La nueva sociedad cuenta con un capital social inicial de 101 millones de euros y su accionariado está repartido entre Banco Espíritu Santo, EBN Banco, Lesepair S.A., Grupo Isolux, directivos, López Gandásegui y Caja Castilla La Mancha. Gamesa Aeronáutica cuenta con cinco divisiones industriales: Ingeniería, Componentes Aeronáuticos, Estructuras Aeronáuticas, Soporte de Producto y Proyectos Especiales. En Araba posee las plantas de GPAy Moasa en Miñano y de Fuasa en Berantevilla. También cuenta con centros en Orense, Sevilla, Cádiz, Toledo, Tarazona, Madrid y Brasil. En total, la plantilla se aproxima a los 2.640 personas. De ellos, 1.100 trabajan en las fábricas alavesas.
Beneficio de 25 millones
GARA
GASTEIZ El grupo Gamesa obtuvo un beneficio neto de 24,9 millones de euros en el primer trimestre del año, un 54,1% menos que en igual período de 2005. La cifra de negocio creció un 15,8%, hasta 387,8 millones, por el aumento de las ventas de aerogeneradores. El descenso en el resultado se debe al menor avance en la promoción de parques eólicos. Excluidas las actividades de Aeronáutica y Servicios, vendidas en abril, el beneficio neto se situó en 22 millones, un 57,7% menos que en 2005. El 84% de la facturación procedió de la fabricación de generadores eólicos, el 12% de la promoción y venta de parques , y el 4% de la energía solar. La plantilla reclama nuevos proyectos
El presidente del comité de Gamesa Producciones Aeronáuticas, Aitor Bezares (LAB), reclamó inversiones y nuevos proyectos que garanticen el empleo y la viabilidad de la compañía. Afirmó que siete años de carga de trabajo «no garantiza nada», porque los proyectos se van agotando. Añadió que todos los proyectos citados por los nuevos dueños son «los que ya existen» y advirtió de que persiste el riesgo de deslocalización. -
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