MADRID
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, compareció ayer tras la reunión del Comité Ejecutivo Nacional de su partido para exigir al Gobierno español que no permanezca «mudo ni impasible» ante las declaraciones de ETA y que ponga «en su sitio» a la organización armada. Rajoy señaló que «no hay ninguna novedad» en la entrevista publicada por GARA el pasado domingo, al interpretar que ETA «vuelve a pedir autodeterminación, Navarra, la legalización de Batasuna y hablan, incluso, de amnistías».
El presidente del PP reveló que José Luis Rodríguez Zapatero le llamó el lunes para hablar acerca del contenido de la entrevista, aunque se negó a informar sobre la conversación que mantuvieron.
Lo que sí hizo fue criticar al Gobierno por no hacer comentarios sobre lo manifestado por ETA, una postura que calificó de «absurda», ya que «el comunicado más comentado fue el del alto el fuego».
Rajoy exigió al Ejecutivo del PSOE que diga que «no va a haber amnistías, ni se va a negociar nada de Navarra, ni va a haber contrapartidas políticas, ni se puede legalizar a Batasuna mientras exista ETA».
«La mayor contundencia»
El presidente del PP consideró que Zapatero tiene que «ser claro» y «tranquilizar a la gente», y recordó que el apoyo de su partido es para que se «verifique la decisión irreversible de ETA de dejar las armas». Mientras eso no suceda, abogó por «aplicar la ley con la mayor contundencia posible» y por mantener la estrategia del denominado como Pacto Antiterrorista. Respecto a unos hipotéticos «compromisos» entre el Ejecutivo español y ETA, Rajoy recordó que Zapatero rechazó ese extremo en la última entrevista que mantuvieron. «Espero que esto se ratifique por parte del Gobierno», apostilló.