Instan a las autoridades sanitarias a vacunar contra la varicela a partir de los doce meses
La Asociación Española de Pediatría llamó ayer a las autoridades sanitarias a incluir la vacuna contra la varicela en el calendario de vacunación del sistema público. «Contra la varicela, vacuna a tu hijo» es el lema de la campaña dirigida a profesionales, padres, educadores, pero especialmente al sistema público de salud, porque según subrayan, la vacuna es segura, evita complicaciones que, aunque en pocos casos, pueden derivar en consecuencias graves, e incluso la muerte de los pequeños.Resaltan que una vacunación universal reduciría los costes que generan las complicaciones.
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Responsables de la Asociación Española de Pediatría (AEP)resaltaron ayer que hay que acabar con la idea de que la varicela es una enfermedad leve, que hay que pasar. «La varicela es una enfermedad infecto-contagiosa muy común en los niños y aunque en la mayoría de los casos es benigna, puede llegar a complicarse y originar la muerte», explicaron tajantes los especialistas en pediatría.El presidente de la AEP, catedrático de Pediatría y Puericultura en la UPVy jefe del Servicio del Hospital de Basurto, Alfonso Delgado, destacó que de los más de 400.000 diagnósticos que cada año se producen en el Estado español, «alrededor de 13.000 corresponden al País Vasco» y resaltó que la enfermedad «todavía» se cobra 15 vidas en ese cómputo general. Las cifras, según puntualizó, corresponden a casos «denunciados» en el sistema de salud, por lo que estiman que la implantación es aún mayor. En este sentido, apuntó que hay tantos casos como nacimientos se registran. Cifró entre un 6 y un 8 por ciento los casos en que la varicela acaba complicándose con sobreinfecciones bacterianas. «La varicela produce picor, los niños se arrascan y como consecuencia, las lesiones primarias de varicela se acaban infectando. Pero también se producen otras complicaciones como pueden ser gastroenteritis, o a nivel del sistema nervioso central, en forma de cerebelitis aguda, meningoencefalitis, casos de miocarditis, nefritis, etcétera», indicó, con respecto a las consecuencias graves que puede acarrear. Añadió al respecto que la AEP tiene constancia de que cada año en el Estado español se hospitalizan alrededor de 1.500 casos, por lo que destacó que además del coste humano en sufrimiento para niño y padres, y de estrés en la familia, genera un coste en pérdida de horas de trabajo, de escolaridad y para la sanidad pública en gastos de hospitalización y tratamientos. Dejó constancia de que un aumento del gasto no es razón para evitar la vacunación en el sistema público, porque según datos que añadió su compañero de comparecencia, Enrique Bernaola, coordinador del Comité Asesor de Vacunas de la AEP y pediatra en activo en el hospital iruindarra Virgen del Camino, «por cada euro que inviertan, se ha calculado que recuperarían 1,6 euros». Por ello, insistieron en que el coste económico de una vacunación universal se debe medir frente al gasto que supone atender 400.000 casos de varicela al año, las complicaciones. «Ante la mortalidad, aunque es baja, de un caso por cada 50.000, dígale usted al que fallece que los índices de mortalidad son bajos, sobre todo cuando esos casos son evitables mediante la aplicación de la vacuna contra la varicela», plantearon.
Años de insistencia
La prestigiosa asociación, que reúne a más de 9.000 pediatras y cirujanos pediátricos del Estado español, reconoció que lleva años instando a las autoridades sanitarias para que el sistema público incluya en el calendario de vacunación la protección de los niños ante la varicela, y lo haga a partir de los doce meses de vida.Según explicó, actualmente el calendario vacunal de la CAV incluye la inmunización ante la varicela a partir de los 10 años, siempre y cuando no hayan padecido enfermedad. Sin embargo, los especialistas en pediatría insisten en la necesidad de aplicar medidas preventivas antes, concretamente a partir del año. «Los estudios señalan que el 85% de los niños pasa la varicela antes de los 5 años, por lo que la vacunación entre los 10 y 14 años sólo beneficia a un grupo muy reducido de niños», explicó Delgado. Pero, si la vacunación presenta tantas y tan incuestionables ventajas, ¿por qué las autoridades no acceden a incluir la misma en el calendario de vacunación del sistema público de salud? El doctor Delgado precisó que en los contactos que mantienen periódicamente con la Administración de Sanidad, a la que cada año asesoran en diversas cuestiones, entre las que se encuentra la vacunación, se aduce como argumento que las complicaciones son más graves entre los adolescentes y adultos, que la vacuna puede acusar pérdida de efectividad en el tiempo o a las complicaciones por herpes en edades avanzadas.
«No se tienen en pie»
A este respecto, subrayó que hay argumentos científicos que ponen de manifiesto la conveniencia de la vacunación contra la varicela y el doctor Bernaola añadió que los argumentos de las autoridades «no se tienen en pie. No podemos esperar 20 años para contar con experiencias sobre complicaciones en avanzada edad por herpes», señaló, al tiempo que aseguró que en breve aparecerá una vacuna para combatir esta complicación.Manifestó que allí donde la vacuna contra la varicela lleva años implantada no se tiene constancia de que aumenten los casos de herpes y sobre la vigencia de la vacuna, no vio problema en que tenga que repetirse una segunda dosis, como ya se está haciendo con otras enfermedades.Aunque no apuntaron que la razón esgrimida por la Administración sea el incremento del gasto, ambos especialistas se centraron en la idea de que ese no es un argumento válido. Resaltaron al respecto que su objetivo es avanzar en prevención, por lo que recordaron que el gasto sanitario dedicado a vacunas supone el 1 por ciento del total, mientras «gastamos millones de euros en medicamentos de dudosa resolución».
«Es una vacuna segura, con resultados espectaculares en varios países»
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La Asociación Española de Pediatría no alberga dudas sobre los beneficios de la vacuna contra la varicela. El doctor Enrique Bernaola, coordinador del Comité Asesor de Vacunas de la misma organización, destacó que «es una vacuna muy contrastada, vigente desde el año 74» y que «varios países acumulan una experiencia de más de 10 años en la adminstración de de la misma «con resultados espectaculares».
Osakidetza no contempla la administración de la vacuna a niños sanos y sólo financia la inmunización frente a la varicela apartir de los 10 años. Sin embargo, estudiso recientes señalan que el 46% d elas vacunaciones prescritas en durante el año 2005, «han sido niños menores de dos años y le sigue el 13% entre dos y seis años».
Bernaola explicó que en el mercado existen dos vacunas para hacer frente a la varicela, de las cuales en el Estado español sólo una puede aplicarse a partir de los 12 meses y la otra se prescribe para chavales a partir de 13 años. La primera está en el mercado con el nombre de Varivax y la segunda se comercializa con el mobre de Varilrix.
Entre 40 y 50 euros
Los padres que quieren inmunizar a sus hijos contra la varicela tienen que pagar ahora entre 40 y 50 euros por la vacuna, de la que a edades tempranas se administra una única dosis. La AEP recomienda a los padres acudir al pediatra para recabar toda la información, así como la administración de la vacuna a partir de los doce meses, porque «hasta el primer año de vida los niños poseen defensas contra la varicela heredadas de su madre que pueden hacer neficaz la vacunación». Convienen que la mejor edad de vacunación es entre los 12 y los 18 meses «y todos los que sobrepasen esa edad y adultos que no hayan pasado la enfermedad».
El bienestar depende más de las condiciones de vida
Eneko LANDABURU
MEDICO
La sociedad de consumo en que vivimos nos quiere hacer creer que nuestro bienestar depende del consumo de productos de las multinacionales farmaceuticas.
No hace falta esperar a caer enfermos. Estando sanos también necesitamos consumir productos farmacéuticos, para protegernos de posibles enfermedades. Y para convencernos, maximizan los peligros de enfermar y las virtudes de sus productos, minimizando sus efectos dañinos. Desde la cuna a la tumba se nos quiere farmacodependientes.
El bienestar de las personas depende mucho mas de las condiciones de vida que de la asistencia medica. Y aunque es verdad que, en ocasiones, la medicina salva vidas, en términos generales, es poco lo que influye en nuestro bienestar, cuando no resultan sus remedios peores que las enfermedades que tratan de curar.
¿Es sostenible una medicina que para prevenir enfermedades se dedica a agredir cada vez con más frecuencia el sistema inmunológico de nuestra tierna infancia? Hay que frenar la carrera de armamento vacunal. -
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