MADRID
El grupo parlamentario de CIU defenderá en el Congreso de los Diputados que los bebés fallecidos en las 24 horas posteriores al parto y aquellos que mueran cuando llevan más de seis meses de gestación, puedan ser inscritos en el Registro Civil con un nombre propio.En la actualidad sólo se puede registrar el nombre propio de aquellos recién nacidos que superen las 24 horas desprendidos del seno materno.
El portavoz de CIU en la Comisión de Justicia, Jordi Jané, considera que debe resolverse esta situación porque se están dando casos en que las familias que sufren la pérdida de su hijo tienen que soportar que en los documentos públicos y privados relativos a su muerte, estos sean nombrados como hembra, varón o difunto.
El Portavoz de Justicia de CIU recuerda el caso de un matrimonio que se ha encontrado en esta situación y ha impulsado la llamada «reforma Amanda», en alusión al nombre que quisieron poner estos padres a su hija y no pudieron inscribirlo en el registro civil.
La iniciativa de CIU defiende además la retroactividad de este derecho, durante el año posterior a la aprobación del mismo.
Un vistazo a los datos estadísticos del Eustat, referidos a los territorios de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, arroja el dato de que entre el año 1999 y 2004, últimos que se pueden encontrar en su página web, las defunciones de bebés antes de las 24 horas de vida se elevan a 97. En 2004 se dio da cifra más alta, con 23 fallecimientos, cuando en 2001 fue de 12.