BILBO
Un vecino de Bilbo ha interpuesto una denuncia por agresión tras ser atacado en Arangoiti al salir en defensa de una mujer que estaba siendo víctima de insultos racistas. La mujer, de origen sudamericano, también ha denunciado los hechos ante la Ertzaintza.Relató que la agresión se produjo el pasado martes, cuando trataba de estacionar su vehículo en un parking de Arangoiti y, al no haber espacio libre, pidió a una mujer que estaba guardando una plaza a su marido que le dejara aparcar, agregando que sólo serían un par de minutos. La mujer aceptó y, al salir de su coche, se percató de que un hombre estaba enfrentándose a la mujer por no cederle a él la plaza de aparcamiento, y añadió que comenzó «sin causa alguna» a atacar a la mujer con insultos racistas como «puta sudaca de mierda, vete a tu país» o «os vamos a echar a todos de aquí».
Ante la situación, el hombre pidió al acusado que se calmara y éste se le enfrentó: «Comenzó a atacarme. Me decía que no me metiera y empezó a golpearme. Al poco tiempo apareció un amigo suyo, que también me golpeó sin saber de qué iba nada». Añadió que, al marcharse los presuntos agresores, acompañó a la mujer al interior de un comercio con motivo de tranquilizarla, momento en el que el acusado volvió a aparecer: «Se acercó con la mano escondida bajo su jersey. Me golpeó una sola vez en la cara, y me rompió la nariz». Detalló que no alcanzó a ver con qué fue agredido, pero aseguró que era un objeto duro y rígido.
La multitud, a favor del acusado
El agredido lamentó que los curiosos que se acercaron a enterarse de lo que sucedió salieran a favor del presunto agresor y que también profirieron gritos racistas: «Al parecer, el hombre es conocido en Arangoiti y los de alrededor salieron en su defensa, y en mi contra. Me de- cían cosas como ‘tú a qué vienes a meterte aquí en medio si nadie te ha llamado’ y la insultaban también a ella, sin saber lo que había sucedido». El herido tuvo que ser trasladado en ambulancia al hospital de Basurto y fue intervenido de una fractura de nariz. Un testigo ayudó a identificar al acusado y éste fue detenido por agresión e insultos racistas y xenófobos.
A raíz de la información publicada por algunos medios de comunicación, el agredido quiso aclarar que no le consta que el acusado llevara ningún arma blanca y que la agresión no se produjo a causa de una discusión por una plaza de aparcamiento, sino que fue golpeado por salir en defensa de una mujer inmigrante que estaba siendo agredida mediante insultos racistas y xenófobos, y que así consta en las denuncias que ambos han interpuesto ante la Ertzaintza y SOS Racismo.
Esta última organización destacó que «el relato de que el tema se produce por insultos racistas y de que la agresión se produjo por intentar salir en defensa de quien los estaba sufriendo es respaldada por varios testigos y denuncias», y añadió que harán un seguimiento del caso y de las denuncias «esperando que hechos como los denunciados no puedan volver a producirse».
Asimismo, SOS Racismo aseguró estar «muy preocupado» porque las muestras de racismo «se ven demasiado a menudo», y llamaron a la sociedad a manifestar su oposición ante las muestras de racismo y a denunciar «cualquier acto racista, con el fin de construir una sociedad igualitaria y sin discriminaciones ni xenofobia».