GASTEIZ
La dirección de Eusko Alkartasuna tenía previsto haber deshojado la margarita para el pasado mes de febrero. Después se puso como meta el verano. Ahora se sabe que no habrá decisión al menos hasta primeros de setiembre, y porque en esas fechas finaliza el plazo que le ha dado el PNV para decidir si concurren en coalición o por separado a las elecciones municipales y forales que han de celebrarse en mayo de 2007.El continuo aplazamiento de la decisión final da la medida de la trascendencia de optar por una opción u otra, y de la indeterminación en la que se mueve la dirección del partido. Según ha sabido GARA, en el seno de la Ejecutiva Nacional de EA hay división de opiniones, con convicciones muy fuertes en ambos sectores.
Pero el PNV apremia. El presidente del EBB, Josu Jon Imaz, aseguró a primeros de junio que «si hacemos algo tendrá que ser antes de setiembre», señalando que a partir de esa fecha su partido «indentificará y dará a conocer sus candidatos», por lo que «las coaliciones serán imposibles».
La apuesta jeltzale por la coalición es nítida, aunque no falten los dirigentes que no ven con buenos ojos algunos de los últimos movimientos de EA, como su participación en el Foro de Debate Nacional, ni sus intentos de marcar un perfil político propio remarcando sus posiciones socialdemócratas e independentistas, ni las declaraciones de algunos de sus líderes «dando lecciones» al PNV.
Sin embargo, el EBB tiene claro que la coalición es «un eje estratégico en la defensa del llamado nacionalismo institucional». Y el lehendakari Juan José Ibarretxe lo ha calificado como una «herramienta política imprescindible».
Por contra, en la dirección de EA la percepción sobre la validez y utilidad de la coalición no es la misma y son muchos los miembros de la Ejecutiva que apuestan por concurrir en solitario a las próximas elecciones municipales y forales.
Por la coalición
Según ha sabido GARA, entre quienes defienden concurrir a las próximas elecciones en coalición con el PNV se encuentra el consejero de Justicia del Gobierno de Lakua, Joseba Azkarraga. Azkarraga es el referente de EA en el Ejecutivo auto- nómico y, por lo tanto, es el que mantiene un contacto más cercano y estrecho con el lehendakari. Además, en los últimos meses viene trabajando codo con codo con Juan José Ibarretxe, en el llamado Consejo Político. En sus declaraciones públicas no se ha manifestado ni a favor ni en contra de un acuerdo, pero fuentes conocedoras de los debates internos del partido lo sitúan nítidamente entre los favorables a presentar listas comunes con el PNV en diputaciones y ayuntamientos.También es conocido que el secretario general de EA en Gipuzkoa, Iñaki Galdós, al igual que toda la dirección provincial, es un claro defensor de la coalición con los jeltzales. No lo ha ocultado en ningún momento. De hecho, podría decirse que en algunas de las decisiones adoptadas por EA, como su participación en el Foro de Debate Nacional y las derivaciones que ello ha tenido, Galdós ha estado más cerca de la posición oficial del PNV que de la de su propio partido.
A favor de ir en solitario
Entre quienes han dejado ver con claridad que preferirían que Eusko Alkartasuna se presentara en solitario a las próximas elecciones se encuentra su secretario de Organización, Rafael Larreina. Según ha declarado públicamente, tiene «muy claro que el país está exigiendo que EA lidere el ámbito socialdemócrata y abertzale» y considera que debe hacerlo «de forma clara, sin ambajes y sin difuminar su mensaje».Pero donde sin duda Rafael Larreina se mostró más contundente fue en su página web. En un artículo del pasado diez de mayo podía leerse: «En mi opinión, Josu Jon está llevando al PNV por la vía autonomista, está dando la espalda a los compromisos electorales que asumimos juntos EA y PNV en las últimas elecciones al Parlamento Vasco, está dejando en delicada situación al lehendakari Ibarretxe, y está acordando con Rodríguez Zapatero (siguiendo la vía abierta por Artur Mas para dar la espalda al Estatuto aprobado por el Parlament de Catalunya) los pasos a dar para llevar a Euskadi por la calle de la Constitución española a la ‘época dorada de Ardanza’».
Por contra, aseguraba que «en Eusko Alkartasuna preferimos caminar por la vía soberanista, afrontando con coherencia, decisión y valentía la solución del problema político de fondo, que no tiene que ver con más o menos competencias, sino con el reconocimiento de la realidad nacional de Euskal Herria y del derecho a decidir que tiene la sociedad vasca».
Según las informaciones recabadas por este diario, también el secretario general de EA, UnaiZiarreta, elegido en el último congreso celebrado en noviembre de 2003, es partidario de concurrir en solitario a las elecciones, al igual que la secretaria de Comunicación, Onintza Lasa.
Por su parte, la única diputada del partido en el Congreso, Begoña Lasagabaster, declaró recientemente que «como partido político tenemos la idea clara de ir en solitario a las elecciones, como cualquier otro partido. Lo normal es ir solos y lo excepcional es ir en coaliciones».
Garaikoetxea, solos
Carlos Garaikoetxea se encuentra orgánicamente fuera de la Ejecutiva de Eusko Alkartasuna, pero nadie le niega su autoridad y ascendente tanto sobre la militancia del partido como sobre la dirección del mismo. Algunas declaraciones públicas suyas, en las que afirmó no querer inmiscuirse desde los medios de comunicación en el debate que se estaba produciendo en el seno del partido, y en las que abogó por mantener la cooperación en el Gobierno de Lakua, haya o no coalición, han llevado a algunos a situarle entre los partidarios de la reedición de la coalición.El propio ex presidente de EA ha negado que se haya pronunciado por concurrir junto al PNV a las próximas elecciones municipales y forales. Y por lo que han informado a GARA desde quienes en la Ejecutiva están en contra de reeditar la coalición, Carlos Garaikoetxea es partidario de presentarse en solitario.
La posición de Errazti
La presidenta de EA, Begoña Errazti, siempre ha mantenido ante los medios informativos que la coalición con el PNV debe obedecer a situaciones extraordinarias, aunque sin aclarar si las actuales lo son o no en su opinión.Según ha sabido este diario, Errazti no se ha decantado todavía nítidamente en el debate que se mantiene en el seno del partido. Pero sus posiciones estarían girando hacia la necesidad de reeditar la coalición.
En su último congreso, en noviembre de 2003, Eusko Alkartasuna apostó por mantener su identidad propia, y condicionó los acuerdos con el PNV al avance en los contenidos de la Propuesta de Nuevo Estatuto Político para la CAV.
Desde entonces, ha acudido en solitario a las elecciones a Cortes españolas de marzo de 2004, y en una coalición distinta de la del PNV en las elecciones al Parlamento Europeo de junio de ese mismo año.
Sin embargo, meses después, en diciembre, PNV y EA reeditaron su coalición de cara a las autonómicas de abril de 2005, con unas negociaciones que se llevaron con suma discreción por ambos partidos.
El acuerdo de dos tercios de la Asamblea
Los estatutos de EA especifican que un acuerdo de coalición con otro partido debe contar con el apoyo de dos tercios de los asistentes a la Asamblea Nacional. En las últimas elecciones autonómicas, la Asamblea de EA dio vía libre al acuerdo con el PNV con el 71% de los votos a favor, un 19% en contra y un 10% de abstenciones. Pero dado el escaso número de asistentes, unos pocos votos podría haber variado el resultado final. -
