Altza XXI reivindica una urbanización sostenible
DONOSTIA
«Habría que recalcular cuál es el territorio que la población actual de Altza debiera haber ocupado en base a los parámetros hoy aceptables de densidad, alturas, anchura de calles, nivel de dotaciones...». O esto es al menos una de las formas de proceder que proponen los vecinos que integran la plataforma popular Altza XXI, que lucha contra las irregularidades que comete el Ayuntamiento en materia de urbanismo, y añaden que «sólo entonces sería planteable, fruto del consenso, si se puede seguir edificando, dónde, cuánto y cuándo». Los vecinos denuncian que llevan desde 1978
reivindicando un modelo de urbanismo sostenible para Altza, que sufre el caos
urbanístico desde la década de los 70 del pasado siglo. Además del caos que ya
tienen integrado en el núcleo urbano, ahora el plan del Ayuntamiento contempla
la construcción de 3.000 viviendas en los terrenos de Auditz-Akular. A las 400
ya en construcción en lo que antes era Nerecan y las 98 que están en marcha en
Bertsolari Txirrita, hay que añadir el plan de construir otras 160 viviendas, de
las que tan sólo 32 serán de VPO, en los terrenos de Pescafría concretamente.
Olvido del Ayuntamiento
Según ha recalcado la plataforma vecinal, resulta que dos de los bloques que están construyendo en Bertsolari Txirrita son parte de aquellos que en su momento se desestimaron por supuestas irregularidades en el proyecto. En aquella época el Ayuntamiento admitió que su edificabilidad había sido consumida por quienes habían construido en exceso. Los vecinos se sienten engañados por un Ayuntamiento en el que el actual alcalde, Odón Elorza, era entonces concejal, y piden respon- sabilidades. Otras zonas, igualmente urbanizadas, sufrieron el caos de los 70 «pero ya no existen planes para construir», como Bidebieta o Beraun, por ejemplo.
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