DONOSTIA
Zeberio II y Urrutia elegirán el material esta mañana, a las 12 del mediodía, en el frontón Galarreta para la primera final individual del Casino Kursaal del próximo sábado en el que no estará Ezkurra, que llevaba 12 años seguidos jugándola.
Por la tarde llegará el festival habitual con un interesante estelar en el que Altuna II y Lizaso, dos pelotaris invictos en agosto hasta su derrota del sábado ante los finalistas individuales, se medirán a un trío formado por Uterga, la revelación del verano, Altuna I y Etxabe.
Zeberio II, tercer clasificado el pasado año tras tener contra las cuerdas en semifinales al campeón Ezkurra, no quiere desaprovechar la oportunidad que se le presenta en su segunda final después de que hace cuatro años se enfrentara al doneztebarra en un partido aplazado a diciembre. Precisamente, la lesión de Ezkurra le ha allanado el camino al acceder a la última ronda sin necesidad de disputar la semifinal.
Urrutia, que el año pasado logró el ascenso tras ganar el Torneo San Fermín, vivirá su primera final del Casino Kursaal después de un exitoso Torneo saldado con cuatro triunfos, entre ellos uno por la mínima frente al propio Zeberio II. Posiblemente buscará el material más vivo que encuentre en el cestaño para hacer daño con su saque y buscar con más facilidad el rebote, desde donde su rival como mucho lleva la pelota a buena.
Al margen del lesionado Ezkurra, que sigue de reposo para recuperarse de su rotura de fibras, el gran ausente de la final es Lizaso, quien ha jugado cinco finales en su carrera. El zaguero será protagonista del estelar de la tarde en el que estará secundado por un Altuna II que también se encuentra en buena forma.
Los dominadores de los partidos de parejas de agosto se las verán con un atractivo trío en el que destaca la presencia de Uterga como botillero. El joven delantero remata perfectamente y ha ganado en constancia, por lo que se ha convertido en la revelación del verano. Estará secundado por un director de total garantía como Altuna I y un zaguero con presencia como Etxabe con ganas de reivindicarse después de una discreta temporada.