DONOSTIA
Desconocidos atacaron ayer con líquido inflamable una sede del PSE en Intxaurrondo. Los hechos ocurrieron sobre las 8.00 y, según informó el Departamento de Interior de Lakua, los daños materiales fueron «escasos»y se limitaron al ennegrecimiento de la persiana exterior, de la puerta de acceso al local, de la pared y del techo de la sede.Por la tarde, hacia las 15.45, un autobús urbano fue quemado en el Boulevard donostiarra y se lanzaron cócteles molotov contra un cajero.
En declaraciones realizadas en el Boulevard, el alcalde Odón Elorza rechazó «clara y rotundamente» estos actos que «causan un hartazgo y un asco infinito». «Es algo realmente injustificable y espero y confío en que este tipo de situaciones y de actos tan cobardes como la quema de autobuses que utiliza la ciudadanía sean condenados por Otegi y compañía», manifestó.
Señaló también que estos hechos «son contrarios al interés y al deseo inmensamente mayoritario de la población de que, de una vez, acabe la violencia y el terrorismo en este país, y no contribuyen a que avance el proceso».
Horas antes, el secretario del PSE de Gipuzkoa destacó que «hoy Euskadi no es más libre por quemar con gasolina una sede socialista». A través de un comunicado, Miguel Buen pidió a Batasuna que «aísle a los violentos que están en su movimiento porque es hora de hacer política y de dejar la violencia atrás».
«Hoy, los hombres y mujeres que queremos vivir en paz y libertad nos sentimos un poco más decepcionados con esas gentes de la izquierda abertzale que continúan utilizando la violencia para amedrentar a los que pensamos diferente», remarcó.
«Descomposición moral»
Para el Ejecutivo de Lakua, «reclamar respeto a los derechos humanos al mismo tiempo que se vulneran es el síntoma más evidente de la descomposición moral, política e intelectual que padecen quienes están detrás de estos actos». En un comunicado, preguntó si «es ésta la contribución que algunos desean poner sobre la mesa para asentar y consolidar el proceso de paz y de normalización política». «Quienes ordenan y ejecutan estos ataques pretenden transmitir que no renuncian a la violencia y que están dispuestos a utilizarla para amenazar y amedrentar», destacó.En la misma línea se pronunció EA, para quien es «inadmisible cualquier tipo de acción violenta ya que atenta contra los principios elementales de la democracia y resulta un claro obstáculo en el actual proceso de pacificación y normalización».
El representante de EB Antton Karrera, reclamó a la izquierda abertzale «una auténtica labor de pedagogía con sus bases, promoviendo valores de respeto y tolerancia».
Desde el PP, su portavoz en la CAV, Leopoldo Barreda, calificó de «grave la falta de respuesta del Gobierno y del Estado de Derecho ante el desafío calculado y extendido protagonizado por Batasuna».
El delegado del Gobierno español, Paulino Luesma, resaltó que «los autores sólo pueden esperar la firme actuación de nuestro Estado de Derecho a través de la acción policial y los tribunales».