BRUSELAS
La Comisión Europea advirtió ayer nuevamente al Gobierno español de que acabará en los tribunales si no modifica la condiciones impuestas por la Comisión Nacional de la Energía (CNE) a la OPA de la alemana E.ON sobre Endesa, condiciones que Bruselas consideró ilegales la semana pasada. «La decisión adoptada por la Comisión Europea es jurídicamente vinculante, tiene que entrar en vigor de manera inmediata y está dirigida al Estado español y no al regulador de la Energía. Por lo tanto, es el Estado español quien tiene que garantizar la aplicación de la decisión de Bruselas», dijo el portavoz de Competencia del Ejecutivo comunitario, Jonathan Todd, al ser preguntado sobre los mecanismos aplicables por la Comisión después de que la CNE ratificara ayer los diecinueve requisitos que exige a la empresa alemana para autorizar la operación.
«Si no la aplica correctamente podemos abrir un procedimiento de infracción contra el Estado español que podría terminar en el Tribunal de Justicia en un plazo muy corto», advirtió Todd. Además, el portavoz explicó que, dado que la decisión tomada por el Ejecutivo comunitario es jurídicamente vinculante, puede ser alegada ante un tribunal español por las partes afectadas, como E.ON o Endesa, para exigir su aplicación inmediata.
Oídos sordos
El asunto está cada vez más cerca de llegar al Tribunal de Luxemburgo, ya que anteayer, el consejo de la CNE decidió reiterar las diecinueve condiciones impuestas a la eléctrica E.ON para comprar Endesa, que Bruselas considera contrarias al Derecho Comunitario. Con esta decisión, los consejeros de la CNE hacen oídos sordos a la advertencia de Bruselas.
El Gobierno español, por su parte, anunció ayer que no tiene intención de proponer al Parlamento la derogación del Real Decreto-Ley que amplió las funciones de la CNE. El ministro de Industria, Joan Clos, no descartó que la disputa con Bruselas llegue al Tribunal de Justicia de Luxemburgo.