La guerra de Somalia llena de refugiados los campos de Kenia
NAIROBI
Una media de 1.000 refugiados somalíes llega cada día a Kenia como consecuencia de los enfrentamientos entre el Gobierno y las milicias de la Unión de Cortes Islámicas (UCI), lo que amenaza con colapsar el campo de refugiados de Dadaab, cerca de la frontera.
«Estamos recibiendo como media al día 1.000 refugiados, la cifra más alta en meses, pues en agosto llegaban diariamente una media de 200», dijo Emmanuel Nyabera, portavoz de la oficina keniana de la Alta Comisaría de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Según Nyabera, a principios de año, el campo de Dadaab, situado en el este de Kenia, a 100 kilómetros de la frontera con Somalia, albergaba a una población de 130.000 personas, una cifra que se ha elevado ya a los 157.000.
Una minoría huye de los enfrentamientos bélicos, como los que hace dos semanas tuvieron lugar por el control de Buur Hakaba, una ciudad estratégica entre la capital, Mogadiscio bajo el control de las milicias islámicas y Baidoa, donde tiene su sede el llamado Gobierno de Transición.
Episodios de hambre derivados de la falta de cosechas en muchas partes de la región de Juba son otra de las causas que están movilizando a la población somalí.
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