MADRID
La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo español denegó la posibilidad de presentar recurso de revisión contra la sentencia de 1963 por la que fueron ejecutados los anarquistas Francisco Granado y Joaquín Delgado. En 1996, en un programa de la televisión franco-alemana Arte, y tras una declaración ante notario, los anarquistas Antonio Martín Bellido y Sergio Hernández declararon ser los verdaderos autores de la colocación de dos bombas en la Dirección General de Seguridad y la Delegación de Sindicatos en Madrid, que sólo produjeros heridos leves, pero hechos por los que fueron ejecutados Granado y Delgado. Para su negativa, el Supremo se basa, entre otras cosas, en que Sergio Hernández se negó a acudir a Madrid a declarar porque temía a los tribunales españoles.
El Grupo Pro Revisión del Proceso Granado-Delgado aseguró que el Supremo «se sitúa fuera del Estado de Derecho de los países democráticos», Aseguró que la sentencia pretende «reconocer a la dictadura franquista como la legalidad de la época».
Criticó que se dé «mayor crédito al montaje acusatorio de la policía franquista que a las declaraciones de los verdaderos autores de las acciones por las cuales fueron condenados y ejecutados Granado y Delgado», quienes «siempre negaron ser los responsables» de los hechos.