La obra del pintor Gonzalo Chillida, reunida por primera vez en un libro
La obra dispersa y vagamente conocida del pintor Gonzalo Chillida, hermano del afamado escultor Eduardo Chillida, ha sido recogida por primera vez con visión retrospectiva en el libro «Gonzalo Chillida. Obra». La publicación repasa a través de 85 piezas la trayectoria de este artista. «Mi padre no es muy amigo del protagonismo», comentó ayer su hija Alicia, cuyo objetivo era crear con este libro un espacio expositivo en el que mostrar los cuadros de su progenitor.
DONOSTIA
El director del Museo del Prado, Miguel Zugaza, Alicia Chillida, y el propio protagonista del volumen presentaron ayer la publicación titulada “Gonzalo Chillida. Obra” (TF.editores). Nacido en Donostia en 1926, Gonzalo Chillida ha desarrollado sus creaciones en relativo silencio desde hace más de 50 años con la excepción de algunas exposiciones individuales en galerías y la organizada en 1990 en el Museo de Bellas Artes de Bilbo. Este creador, quien recibió en 2001 la Medalla de Oro a las Bellas Artes, vive y trabaja en Donostia, donde aún dedica la mayor parte del día a su gran pasión: pintar, según desveló su hija Alicia. «Mi padre no es muy amigo del éxito o del protagonismo. Es una persona humilde en el sentido más puro de la palabra»,comentó Alicia Chillida, cuyo objetivo era crear con este libro un «espacio» expositivo en el que mostrar los cuadros de su progenitor. Dijo que Gonzalo y Eduardo Chillida, que «siempre se quisieron mucho», nunca trabajaron juntos y constituyeron las dos caras de una misma moneda, ya que fueron «muy iguales y muy distintos» al mismo tiempo. El primero es «más silencioso», mientras que el segundo, fallecido el 19 de agosto de 2002, era «más amigo del diálogo», recordó Alicia, quien explicó que existía un tercer hermano Chillida, ya muerto también quien, para satisfacción de su madre, nunca pensó en dedicarse al arte. La publicación verá la luz en español e inglés y que incluye textos firmados por el poeta Gabriel Celaya y el pintor Antonio Saura.
Homenaje
Gonzalo Chillida dejó patente en el acto su falta de apego por la notoriedad, ya que su jocosa intervención se limitó a unos escasos minutos en los que quiso convertir esta presentación en un «homenaje» a toda su familia. Miguel Zugaza, por su parte, ensalzó la obra de este «extraordinario pintor oculto, casi secreto y silencioso, cuya obra sigue siendo una perfecta desconocida». Calificó a Gonzalo Chillida como el mejor paisajista entre los abstractos. En el lugar en el que se encuentre el límite entre lo figurativo y lo abstracto se debe situar, según Zugaza, la creación de este artista, cuyo silencio y manera de ocultarse, hace que se presente ahora como un «auténtico descubrimiento».
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