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Y la nieve dejó paso al hielo y al frío
En el pueblo navarro de Goñi, ayer, esperaban desde el lunes al panadero. En el pequeño núcleo alavés de Gereñu los carámbanos retaban orgullosos este jueves a la ley de la gravedad. La nieve abandonó Euskal Herria, pero dejó paso a las temperaturas más bajas en lo que llevamos de invierno, con mínima histórica en Biarritz desde 1962, con hasta -13º en Irati o los -7º de Agurain. Temperaturas, en cualquier caso, normales para estas fechas. Hoy y mañana, se prevé una desbandada generalizada hacia cimas como las de Urkiola o Gorbeia, o hacia las ya blancas pistas de esquí.
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GASTEIZ
Hace apenas una semana, en las calles de la capital bilbaina, mucha gente paseaba por la noche en mangas de camisa y con una temperatura de 20º. Esa anormalidad ha dejado paso estos días al crudo invierno que ayer y se agudizará en la mañana de este sábado, nos dejó registros mínimos más normales para la estación en la que estamos. Incluso en algunos lugares, como en la estación meteorológica del aeropuerto de Biarritz, mínimas históricas: hasta -6,7º, algo que no ocurría desde 1963. En cualquier caso, ese intenso frío no tiene nada que ver con el invierno pasado o el anterior, cuando en puntos en altura como en Remendia-Salazar se llegó a efemérides desconocidas en Euskal Herria como -24,8º, y ayer esa mínima en este enclave navarro se situó en los -10,1º; muy cerca estuvieron en Abaurrea Alta, el núcleo habitado más alto de Euskal Herria, con -9,5º, y más abajo aún en Irati, con -13º.
Este primer temporal invernal en suelo vasco no ha sido especialmente intenso y, como suele ocurrir, bastante desigual. Esta vez han sido los habitantes del oeste de Bizkaia, incluida su capital, Bilbo, los que menos han disfrutado del manto blanco. A buen seguro que hoy y mañana serán cientos de vizcainos los que se desplazarán a lugares como el alto de Urkiola para lanzarse los primeros copos de nieve de este invierno y estrenar el trineo que trajo el Olentzero. El monte Gorbeia será otro de los habituales lugares de perenigraje de muchos aficionados a la montaña u, ocasionalmente esta vez, a la nieve. «El monte es para los montañeros y seguro que mañana por hoy vemos alguno con zapatillas blancas pisando nieve. Y luego pasa lo que pasa», comentaba ayer Javi, el veterano y sabio guarda del refugio de la mítica cima vasca. A 1.066 metros de altitud en que se encuentra este “descanso del montañero”, el termómetro bajó ayer noche hasta -8,5 y todavía a las dos de la tarde apenas había subido un grado.
«Los accesos están bastante mal advertía ayer y desde Areatza, que habrá unos catorce kilómetros hasta aquí, ya hay que subir andando porque no se puede pasar con coches». En el refugio, la altura de la nieve ha alcanzado 1,2 metros. «Que la gente tenga cuidado, que luego pasa lo que pasa», insiste, tras recordar que el jueves un montañero tuvo que ser rescatado en el monte Ganekogorta.
Otro de los peligros estará en las carreteras. Ayer, la nieve dejó paso al hielo sobre todo en las carreteras secundarias. En núcleos como la capital alavesa, desde la tarde del jueves se emplearon unas 300 toneladas de sal para evitar la formación de hielo en aceras y calles de la ciudad en previsión de esas bajas temperaturas. Para esta pasada noche, Euskalmet esperaba mínimas de hasta -7º en Gasteiz. En Iruñea, el INM preveía que el termómetro bajara esta noche pasada hasta -5º.
En la jornada del jueves, destacan los -7º que alcanzaron en la localidad alavesa de Agurain. En la cercana Dulantzi llegaron a -4º y en la capital alavesa no fue más allá de -3º, pero la máxima casi no respiró por encima de los 0º en todo el día. En Bizkaia, en Otxandio tuvieron -2,5, en Elorrio -0,7º, en Balmaseda -0,3 y en Bermeo 2,3º. En Gipuzkoa, la web de Euskalmet se había vuelto loca y registraba mínimas imposibles de hasta -43º en Zegama o -29º en Ordizia. En Nafarroa, el termómetro en Iruñea bajó sobre las 7.00 hasta los -5,1, pero a mediodía seguían sin llegar a los 0º. En Etxarri-Aranaz bajaron a los -5,8º. En cualquier caso, temperaturas normales para estas fechas, mientras algunas previ- siones ya anuncian más nieve, quizá, en torno al 5 de febrero. Y, seguro, no será la última vez.
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