ZANGOTZA
Un cajero automático de Zangoza, una oficina de Telefónica y dos autobuses de Gorliz fueron objeto de sabotajes en este último caso, frustrado en la noche del viernes.
En torno a la medianoche, desconocidos hicieron estallar un petardo colocado debajo del monitor de un cajero automático del Banco Santander Central Hispano en la localidad navarra. El sabotaje provocó un agujero que dejó fuera de servicio la instalación.
En el caso de la localidad vizcaína de Gorliz, ayer se informó de que el viernes, alrededor de las 21.00, desconocidos intentaron prender fuego a varios autobuses, pero al acercarse agen- tes de la Ertzaintza no ha- brían logrado su objetivo. En Zornotza, por su parte, desconocidos lanzaron cócteles molotov contra la oficina de Telefónica.
La Delegación del Gobierno español en Nafarroa condenó «rotundamente los actos de violencia callejera, tan estéril como incívica y antidemocrática», y se solidarizó con «la entidad bancaria y los vecinos de Zangoza, cuya pacífica conviven- cia se ha visto violentada».
Eusko Alkartasuna también condenó todos estos ataques en una nota de prensa en la que advirtió de que constituyen «auténticos obstáculos en el proceso de pacificación y normalización política de Euskal Herria».