«Txakurkalea», los perros de Bilbo se pasean por Nueva York
«Txakurkalea», el atípico documental dirigido por David Cívico y Guillermo Sánchez y protagonizado por perros del Casco Viejo bilbaino, se exhibe estos días en Nueva York, dentro del programa del International Independent Film and Video Festival.
Martin ANSO | DONOSTIA
«Txakurkalea», de David Cívico y Guillermo Sánchez, recPlay, ha sido seleccionado por el International Independent Film and Video Festival y se exhibe estos días en Nueva York.
Es la primera salida al exterior del filme, del que, en realidad, hasta ahora sólo se han hecho dos proyecciones públicas en Euskal Herria, la primera en diciembre de 2006, en el Kafe Antzokia de Bilbo, y la segunda, hace apenas unas semanas, en el Photomuseum de Zarautz. «Tardamos casi dos años en completar el trabajo -explican al respecto David Cívico y Guillermo Sánchez a GARA- y la verdad es que estábamos bastante saturados, así es que, tras el estreno en el Kafe Antzokia, nos tomamos un respiro. Después empezamos a mover la película y fue una bonita sorpresa que nos comunicaran que había sido seleccionada para ese festival neoyorquino».
El Independent Film and Video Festival, que hasta el próximo 6 de marzo exhibirá 250 filmes de más de cincuenta países, pasa por ser un importante escaparate para las producciones independientes y, especialmente, para aquellas «un tanto atípicas».
Ése es, sin duda, el caso de «Txakurkalea», un documental -en el que no falta la ficción-, protagonizado por perros del Casco Viejo bilbaino. «El Botxo está lleno de perros, muchos más de los que se puedan pensar, por lo que, de cara al casting, ha habido mucha oferta y la colaboración de los propietarios ha sido total. Al final, hemos elegido a los protagonistas del filme en función del personaje que podían representar», afirma Cívico.
«Empezamos a filmar a perros en el Casco Viejo de forma un tanto circunstancial -añade-, pero en seguida nos dimos cuenta de que ahí, de rodillas para abajo, existía todo un submundo que se regía por sus propias reglas, y así empezamos a trabajar sobre un proyecto que indaga en la relación entre los perros, de los perros con los humanos y de cuestiones como la territorialidad o los cambios radicales en el espacio urbano, que afectan a unos y a otros».
Falso documental
En «Txakurkalea» son atípicos los protagonistas, los temas e incluso la duración del filme, de alrededor de una hora. Por supuesto, también el tratamiento. «Se supone que es un documental, pero, en realidad, es un falso documental -aclara Sánchez-, y es que explorar los límites entre la realidad y la ficción ha sido uno de nuestros objetivos».
En contra de lo habitual en los documentales sobre animales, en «Txakurkalea» no existe un narrador. El hilo narrativo está basado en el montaje, que presenta a los protagonistas del filme, los perros, en situaciones que van del drama a la comedia, pasando por géneros como el western. También la animación tiene un papel.
«`Txakurkalea' es también, además de forma muy evidente, un musical -añade recPlay-. Tanto la banda sonora, compuesta exclusivamente para la película, como los sonidos de la ciudad son fundamentales».
Respecto a la banda sonora, cabe decir que suena a funky y a blues. «En cuanto fuimos conscientes del proyecto que teníamos entre manos, en seguida nos sonó a música negra, por eso de la vida perra», dice Cívico. La necesidad de contar con esa banda les llevó a abrir el proyecto a más gente, y así llegaron las canciones de Atom Rhumba, The Uski's, Makala, Joserra Senperena, Boggie Punkers, Grasan o Pascual Molongua, algunas compuestas ex professo para «Txakurkalea». El sello NoizPop las editó todas conjuntamente en un CD-libro.
«Esto ha ido creciendo, hemos tenido que incorporar cada vez a más gente, y, al final, más que una película, `Txakurkalea' es un proyecto multidisciplinar, porque es también un CD-libro, unas instalaciones que en abril presentaremos en la sala Rekalde, una web (txakurkalea.com) que tiene su propia dinámica... y ya veremos», concluye recPlay.
«Txakurkalea» es una película, pero también es, según destacan sus creadores, un CD-libro con las canciones de la banda sonora, unas instalaciones que próximamente presentarán en la sala Rekalde y una web.