Arrate considera una obligación ganar hoy el partido en Vigo contra el Octavio Pilotes Posada porque sólo de esa manera apurará hasta el final sus escasas opciones de mejorar la séptima posición y dar caza a Valladolid o CAI Aragón para garantizarse la presencia en Europa la próxima campaña.

Con sólo tres partidos por delante, las únicas cuentas posibles para los de Eibar pasan por sumar los seis puntos y esperar a que alguno de sus predecesores se dejen cuatro en el camino, sobre todo en el caso del cuadro aragonés, porque en caso de empate final los guipuzcoanos harían valer su mejor diferencia de goles particular.

El rendimiento que ofrecerán los eibarreses, no obstante, es una incógnita, porque retoman la competición liguera después de una Copa que vivieron con intensidad y en la que además perdieron a dos de sus baluartes, el extremo Unai Arrieta y especialmente el lateral Mariusz Jurkiewicz. El polaco, máximo goleador albiazul, sufre las consecuencias de un fuerte esguince que le obligará a descansar, cuando menos, este fin de semana, en tanto que Arrieta tiene el menisco dañado.