Mano Dieciseisavos de final del Cuatro y Medio
Patxi Ruiz despeja dudas sobre su estado de forma
El zaguero de Lizarra fue muy superior en todos los aspectos a un recién estrenado en esta competición en Primera como es Ongay. El juego largo y la velocidad fueron las claves de la victoria del de Asegarce.
PATXI RUIZ 22
ONGAY 7
Imanol CARRILLO | TOLOSA
Patxi Ruiz despejó toda duda sobre su estado de forma tras un atípico verano en el que no ha podido jugar lo que le hubiese gustado a causa de molestias en la espalda. El zaguero de Lizarra arrolló de principio a fin a un Ongay que debutaba en el Cuatro y Medio de Primera.
Todas las miradas del Beotibar de Tolosa estaban puestas en el zaguero de Lizarra. La incógnita del frontón guipuzcoano era la de ver cómo podría actuar Ruiz, ya que sólo había podido realizar «3 ó 4 entrenamientos» de preparación. Incluso los aficionados más cercanos a los vestuarios -el resto, seguramente, ni se dio cuenta- se alarmaron antes de comenzar el partido cuando el navarro se retiraba corriendo y preguntando por el médico.
Pero sólo se quedó en un susto, en «un pequeño pinchazo sin importancia», algo que ni se notó durante el choque, puesto que el zaguero de Asegarce dominó de principio a fin a un Ongay que no se encontró a gusto en ningún momento del encuentro.
Zaguero y delantero frente a frente en la jaula, pero la victoria fue para el pelotari más experimentado, que sacó verdaderamente bien, poniendo en serios aprietos al de Satrustegi.
Para los amantes de la estadística, cabe redordar que Ruiz finalizó con cuatro saques, por dos de su rival. Y eso que lo suyo, en un principio -como zaguero-, debe ser el resto.
El saque no fue la única faceta donde dominó el de Lizarra. Al igual que en el primer partido del festival -se jugaron tantos eternos-, la eliminatoria de dieciseisavos del Cuatro y Medio no brilló por los constantes ataques de los pelotaris, ni por golpes impresionantes e imposibles, sino por el intento por parte de los dos de alargar el tanto utilizando pelotazos largos y buscando la marca naranja del límite de la jaula.
Y ahí ayudó más de la cuenta Ongay, que cometió tres pasas en juego sacando de quicio al delantero de Aspe -como anécdota, se sentó en una silla de la primera fila, desahogándose todo lo que podía-.
El 11-0 de parcial que le endosó el de Lizarra terminó por hundir al joven pelotari.
Patxi Ruiz se enfrentará a Retegi Bi en octavos de final el sábado en Zornotza. Un rival, sin duda, muy diferente al de ayer.
