PSOE y PP no cambian sus discursos ante el último comunicado de ETA
Tanto el PSOE como el PP han manteniendo sus habituales discursos tras el compromiso de ETA de dar «los pasos que sean necesarios» para favorecer «el cambio político» desde postulados democráticos, tal como ratifica en su último comunicado. Las reacciones que suscitó esta declaración entre partidos de ámbito vasco tampoco son novedosas. Aralar insiste en pedir «el cese unilateral de las armas y sin precio político», y Hamaikabat lo califica de «papel mojado».
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La disposición de ETA a favorecer un proceso democrático en el que todos los proyectos políticos sean materializables no ha tenido correspondencia en los partidos mayoritarios españoles, que siguen manteniendo su discurso en favor de la actual situación.
Así, el secretario general del PSE de Gipuzkoa, Iñaki Arriola, vio en el último comunicado de la organización armada vasca «más de lo mismo». En declaraciones realizadas ayer en Orio, en cuyo cementerio fue recordado el ex concejal Juan Priede al cumplirse ocho años de su muerte en un atentado de ETA, Arriola aseguró que este comunicado «no aporta nada».
A su juicio, «la única noticia que los demócratas esperan» de ETA es «la que diga a todos los vascos que ha acabado de una vez, que se ha disuelto y que, de una vez por todas, se quita de en medio y deja vivir a las personas en paz y en libertad».
Por su parte, el vicesecretario general de Comunicación del PP, Esteban González Pons, afirmó que los comunicados de ETA «no tienen valor» y que esta organización «se comunica sólo con bombas, con balas y con sangre».
En una entrevista concedida a la emisora Onda Cero, dijo que el comunicado es «una bocanada de una banda que se encuentra arrinconada y a punto de ser vencida», por lo que consideró necesario «no desaprovechar esta oportunidad». A este respecto, abogó por «no hacer caso a ETA» y «evitar a toda costa que sus marcas blancas se puedan presentar a las próximas elecciones».
En esta misma línea argumental, el portavoz del PP en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, Leopoldo Barreda, manifestó que «no hay que dejarse distraer por los cantos de sirena» de la organización armada vasca, sino «reafirmarse en la voluntad, en la determinación de los demócratas de derrotar a ETA, de derrotar todos sus montajes y pretensiones».
Por su parte, Hamaikabat y UPyD coincidieron en calificar de «papel mojado» la declaración de ETA. «Nadie les cree, sus comunicados son papel mojado, mienten más que hablan y están cada día más solos», indicó Gorka Maneiro (UPyD).
Hamaikabat aseguró que «la sociedad vasca únicamente tomará en consideración el comunicado donde ETA anuncie el abandono definitivo de las armas». Además, consideró que esta organización «tiene que cesar totalmente su actividad y no ejercer tutelas de procesos de reflexión abiertos».
Aralar mostró su «profundo desacuerdo» con el comunicado de ETA, «no sólo por motivos democráticos, sino también por motivos llanamente políticos y prácticos». Junto a ello, requirió a ETA el «cese unilateral y sin precio político en el uso de las armas». Según este grupo, ETA «debe empezar por acatar y obedecer» la voluntad del pueblo vasco, «que le ordena el cese unilateral definitivo del uso de las armas». Junto a ello, afirma que «la reclamación de compromiso que efectúa la organización ETA a todos los agentes políticos, incluido el Gobierno de España, constituye no sólo un error de arrogancia, sino una equivocación y una aberración letal, porque es tanto como quedar a expensas de la voluntad del Gobierno de Madrid».
Por su parte, el coordinador de Ezker Batua, Mikel Arana, opinó que ETA está «en fase terminal» y que su último comunicado refleja «la división interna entre quienes apuestan por vías políticas y los que abogan por mantener la violencia». GARA
