El primer ministro tailandés, Abhisit Vejjajiva, se empeña en reiterar la vuelta a la normalidad del país tras la operación militar que puso fin a dos meses de protestas por parte de los «camisas rojas» en la capital, pero la nueva ampliación del toque de queda en Bangkok y en 23 provincias del norte y noroeste de Tailandia pone de manifiesto el cierre en falso de esta crisis política que no ha hecho sino ahondar en la profunda división social ya existente.
En el mundo de los servicios secretos hay de todo menos una cosa: casualidades. Por lo tanto, no era ninguna casualidad cuando a mediados de marzo el diario conservador «Frankfurter Allgemeine Zeitung» sorprendió con la noticia de que el servicio secreto exterior, el Bundesnachrichtendienst (BND), había abierto sus archivos sobre los oficiales nazis de las SS que trabajaban en su seno.
El primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, se disculpó en Okinawa por su decisión de mantener en esa isla la polémica base de EEUU, pese a que durante su campaña electoral se comprometió a lo contrario.