La marcha que partió de Nafarroa lleva su mensaje de solidaridad hasta Puerto
Tres autobuses han recorrido ya más de mil kilómetros este fin de semana para arropar a los ciudadanos vascos encarcelados en Andalucía. Los integrantes de esta marcha organizada por Etxerat resaltan que «el lazo que nos une con ellos nunca será cortado».GARA |
Alrededor de 130 ciudadanas y ciudadanos navarros han sobrellevado con ánimo este fin de semana los 1.200 kilómetros que los separan de sus convecinos encarcelados en las prisiones andaluzas de Puerto I, II y III con el objetivo de transmitirles su solidaridad y cariño.
La marcha organizada por Etxerat llegó con un retraso de tres horas debido al férreo control policial que tuvo que superar nada más arrancar. Decenas de agentes, uniformados y de paisano, abordaron los autobuses sin ni siquiera salir del polígono industrial donde se habían dado cita. Los policías obligaron a los ocupantes a descender del autobús de cinco en cinco, identificándolos y registrando sus pertenencias. Tras casi tres horas, los autobuses pudieron reanudar la marcha.
Ése fue el único obstáculo que se les interpuso en el largo trayecto y sobre las 11.30 la caravana solidaria arribó a Puerto de Santa María, donde les esperaban personas procedentes de diferentes puntos de Andalucía que deseaban solidarizarse con los vascos.
Tras almorzar emprendieron el camino hasta la prisión de Puerto III, donde mediante gritos, cohetes y el sonido de la txalaparta y el txistu mostraron su apoyo a los presos allí dispersados. Un joaldun desfiló, además, frente al vallado ante la mirada atónita de los policías. Los mismos actos de solidaridad se repitieron en Puerto I y II, antes de subir de nuevo al autobús.
Apurtu.org está realizando el seguimiento directo de esta marcha en la que participan personas de todas las edades. Como se recoge en esa web, los marchistas tienen presentes en todo momento a los familiares de presos que hacen este trayecto cada fin de semana: «Esto es muy duro», precisa uno. Pese a todo, insisten en que «el lazo que los une con los presos nunca será cortado».
Tras el veto impuesto a la dinámica Pausoz Pauso en abril, ayer Azkoitia, Azpeitia, Zestoa, Zumaia, Zarautz y Orio acogieron movilizaciones en favor de los derechos de los presos políticos.