De Amalur a Franco elegido por la gracia de Dios, vascos y religión
Félix Placer ha escrito en Txalaparta un ensayo en el que se analiza el papel de la religión en Euskal Herria en las distintas épocas históricas, tanto en un plano identitario como político. Asegura que los mitos y las creencias primitivas no han desaparecido del todo.
Aritz INTXUSTA | IRUÑEA
El sacerdote Félix Placer ha finalizado un proyecto «osado»: recorrer la historia para buscar la interrelación entre la religión y los vascos en cada época. Sus conclusiones se presentan en «La religión en Euskal Herria», un ensayo en castellano que ha editado Txalaparta. El libro destaca por valiente a la hora de apuntar los orígenes paganos (aunque a Placer no le gusta demasiado esta palabra) de algunas de las creencias actuales, y también por su contundencia en las críticas a la postura de la Iglesia en las últimas décadas, que califica como «agresiva» hacia la identidad vasca.
«La religión en Euskal Herria» es un libro muy sintético. En poco más de 231 páginas Placer se remonta hasta la prehistoria para tratar de ofrecer una imagen sobre lo que ha supuesto el mito y, posteriormente, el cristianismo en la forma de concebirse a sí mismos que han tenido los vascones. Lejos de planteamientos teológicos, este sacerdote apuesta por un punto de vista antropológico a la hora de abordar este proyecto.
«Partir desde el inicio, desde las creencias de los primitivos vascones resulta extremadamente complicado», confiesa el autor, quien se apoyó en disciplinas como la etnografía, la arqueología o la propia antropología para tratar de dibujar el mapa de creencias previas a la llegada de los romanos. Placer describe la religión propia de los vascos como «animista» y «horizontal», es decir, con numerosas deidades con distintos poderes (Amalur, Mari, Eguzki...), pero sin que uno de ellos fuera superior al resto.
El autor del libro, no obstante, advierte de que estas primitivas creencias se mezclaron ya con las de otros pueblos antes de la llegada de la escritura, y pone como ejemplo los dólmenes, que no son específicos de Euskal Herria, o el propio término Jaungoikoa, que asegura que es «importado».
Cristiandad como política
Muchos de estos mitos han llegado hasta nuestros días, aunque adulterados. Placer ubica la cristianización de los vascones entre los siglos IX y X, pero remarca que el proceso no supuso un borrón y cuenta nueva, sino que ambos sistemas de creencias se mezclan. Olentzero pasa de emisario a sobreponerse a los reyes magos, etc.
Sin embargo, para Placer, el cambio fundamental que supone el cristianismo para los vascos es su incorporación a «la cristiandad como realidad política». El poder del Papa para la elección de reyes, las bulas que autorizaron la conquista del Estado navarro, etc. serán cruciales durante el medievo. Posteriormente, el cristianismo se convertirá en emblema de carlistas y del PNV.
Más tarde, con la «cruzada» de Franco y, en la actualidad, con las actitudes españolistas de la Iglesia, ésta ha pasado a ser una entidad «represiva» para con los vascos, expone Placer, que lamenta que la jerarquía católica haya elegido bando.
Félix Placer emite su análisis de los últimos movimientos de la Iglesia en Euskal Herria, y carga contra sus hipocresías a la hora de reconocer a las víctimas del golpe de estado de 1936 y la dictadura.
Título: «La religión en Euskal Herria».
Autor: Félix Placer Ugarte.
Editorial: Txalaparta.
Páginas: 231, más bibliografía.
Género: Ensayo antropológico.
Epílogo: Paulo Agirrebaltzategi.
«Euskal Herria ha dejado de ser lo que era», asegura Placer. «Antes, se entendía que euskaldun era igual a fededun -que el vasco era creyente siempre-, pero ahora hemos de entender que esta sociedad es predominantemente laica». En su libro, Placer defiende que el sentimiento religioso que identificó a los vascos en su día es equiparable a la querencia íntima que un no creyente tiene hacia su tierra. «Utilizo la metáfora de un río que arranca en el principio de nuestra historia; creo que ahora nos encontramos en la fase final, en el delta, donde este río se ha subdividido en varios ramales. Pero, a mi juicio, se trata del mismo río y lo importante es que se produzca un diálogo entre todas estas concepciones que hoy se existen y que hacen referencia, al fin y al cabo, a este íntimo sentimiento identitario», explica el autor de «La religión en Euskal Herria».
Por otra parte, una de las grandes aportaciones del libro de Placer es el análisis de la religión en la literatura vasca. En cada etapa histórica analizada hay un capítulo reservado a la literatura y a los escritores vascos. A.I.