Los mercados siguen con la marcha atrás, presionados por un conjunto de factores macroeconómicos y por la persistente caída de las materias primas. En EEUU sigue creciendo el miedo a un inesperado parón en la recuperación, dado que el desempleo está reflejando mayor debilidad económica de la esperada. Así, después de la decepción causada por el informe de empleo privado del miércoles, ayer se pasó al peor dato en nueve meses en las peticiones semanales de subsidio de desempleo. Ambas referencias no permiten muchas ilusiones respecto del dato global de paro en abril, que se conocerá hoy. Las materias primas, por su lado, sufrían por la sospecha de la desaceleración. En Europa, la decisión del BCE de mantener los tipos en el 1,25% y alejar la amenaza de nuevas subidas a corto plazo permitió la revalorización del dólar. Al cierre, el Ibex escapó de los mínimos de la sesión para alcanzar los 10.627,30 puntos, tras dejarse un 0,80%. En el resto de Europa, a excepción de Fráncfort, que sumó un 0,04%, las correcciones fueron más acusadas. París bajó un 0,95%, y Londres, un 1,07%. En el Ibex, BBVA cayó un 1,51%, tras presentar unos beneficios trimestrales de 1.150 millones, un 7,3% menos que hace un año. Los peores fueron Telecinco (-5,69%), Popular (-2,89%) y Bankinter (-2,79%). Iberdrola, pese a superar las previsiones con sus cuentas, cedió un 0,10%. Las mayores ganancias correspondieron a IAG (+3,75%) y Gamesa (+1,48%). En París, el más beneficiado fue Alcatel-Lucent (+3,65%), mientras que Société Générale (-4,98%) sufría por su negativo balance trimestral.