El dicho popular asegura que es cuestión de «renovarse o morir». En su décimo aniversario, Kutxaespacio de la Ciencia de Donostia ha optado por lo primero, empezando por cambiar de nombre. Rebautizado como Eureka! Zientzia Museoa, su director, Ignacio Zuzuarregi, anunció ayer que el espacio dedicado a la divulgación de la ciencia comienza una nueva andadura con el objetivo de seguir siendo el nodo de intermediación entre ciencia y sociedad.

Los responsables optaron por la palabra «eureka» porque «se identifica con el descubrimiento, es internacional y además alude al matemático Arquímides, uno de los científicos más importantes de todos los tiempos», en opinión del primer director del museo, Félix Ares.

El cambio de nombre es el indicador de que el interior del centro también sufre una evolución. Este futuro recorrido estará basado en nuevos formatos y actividades que acerquen el conocimiento de la ciencia.

Por un lado, se ampliará su oferta cultural a través de nuevos espacios de simulación -un aspecto que gusta y atrae a la gente joven- y, por otro, se seguirá con la renovación del museo. En este último apartado destaca el Planetario, que se sustituyó por el anterior en 2008, y «Txikiklik», la zona infantil destinada a los menores de entre cuatro y nueve años, y que ha sido remodelada al completo este mismo año.

«Prohibido no tocar»

Si bien la premisa del museo es «Prohibido no tocar», en palabras de Zuzuarregi es en ésta área infantil donde es obligatorio coger, tocar y experimentar «para que los menores aprendan mientras juegan».

Nada más entrar, el visitante se topa con una boca gigante. En la garganta, cuatro botones representan los cuatro gustos -ácido, salado, dulce y amargo- y, al pulsar cada tecla, se ilumina una zona determinada de la gigantesca lengua, aquella que identifica cada gusto. También hay una mano enorme que ayuda a explicar los diferentes tactos mediante retales suaves, ásperos o blandos, así como la diferencia entre sentir frío o calor. Son, en definitiva, «contenidos que tienen que ver con la ciencia de la vida».

Aprovechando su ubicación estratégica en el parque tecnológico de Miramon, el centro también servirá de escaparate de las empresas, concretamente de los proyectos científicos que realicen.

En esta nueva andadura, la primera planta del edificio estará dedicada al cuerpo humano. Una exposición sobre el cerebro será la muestra inaugural. Por ultimo, adelantaron que se ofrecerán nuevas colonias de verano científicas.

El más visitado

Tanto Ares como Zuzuarregi hicieron un balance positivo de Kutxaespacio de la Ciencia al destacar que casi un millón y medio de personas han visitado el museo en sus primeros diez años, de los cuales casi 500.000 han sido estudiantes, siendo el museo más visitado por los escolares. En cuanto a los futuros visitantes, uno de los objetivos será atraer al público joven, que no se acerca tanto como antes a los centros divulgativos.