Un policía municipal de Bilbo -Emilio Diego García, de 49 años, destinado en la comisaría de Garellano y con 22 años de servicio- falleció ayer en la A-8 después de ser atropellado cuando se apeó de su vehículo tras una colisión con otro turismo.

El guardia urbano murió y otras dos personas resultaron heridas, en torno a las 5.50, después de que un Peugeot 306 y un Fiat Stilo colisionaran y el policía municipal bajara de su vehículo. En ese momento, fue arrollado por un Opel Vectra que circulaba por la autopista a la altura de la salida de Sabino Arana, en sentido Cantabria.

Como consecuencia del siniestro, tres personas resultaron heridas y los servicios asistenciales, desplazados al lugar, no lograron salvar la vida del policía, que falleció prácticamente en el acto.

Más tarde, a través de un comunicado, sus compañeros lamentaron la muerte y se solidarizaron con su familia. Según recordaron, el agente fallecido se incorporó a la Policía Municipal en 1989 y, desde esa fecha, siempre desarrolló su labor profesional en Seguridad Ciudadana, fue «patrullero de calle» en la comisaría central, «lo que le dotó de una gran experiencia profesional que le permitía realizar cualquier tipo de intervención con una gran solvencia».

Le recordaron como una persona «extrovertida, siempre alegre y deportista, que, desde antes de su incorporación a la Policía Municipal, estuvo federado en rugby, practicó atletismo y ciclismo, aficiones que seguía desarrollando y que había contagiado a su grupo de trabajo, con los que participaba en numerosas carreras populares y otras actividades de ocio».

Herido en Anotz

Por otro lado, un varón de 52 años resultó herido con lesiones de pronóstico reservado al salirse de la carretera y volcar la furgoneta en la que viajaba en Anotz, en Ezkabarte, junto a otras tres personas que salieron ilesas.

El siniestro, cuyas causas investiga la Policía Foral, se produjo a las 5.15 en el punto kilométrico 15,5 de la NA-7010, la carretera de Irurtzun a Astrain. En la furgoneta viajaban cuatro personas y el herido ocupaba el asiento delantero derecho. Las lesiones las presentaba, sobre todo, en el rostro y las piernas.