En el marco del proyecto «Construyendo puentes de reconciliación», Lokarri organizó un viaje Belfast a principios de este mes con el objetivo de recoger experiencias en torno a la memoria, víctimas, justicia, diálogo político y el proceso de paz irlandés. La delegación estuvo integrada por representantes del Consejo de la Juventud de Euskadi (EGK), Gazte Independentistak, Alternatiba, Gazte Abertzaleak, Iratzarri, Juventudes Socialistas de Euskadi y PNV.

Tras su regreso, ayer ofrecieron un rueda de prensa en Bilbo, durante la cual expusieron tres grandes conclusiones que han extraído del proceso irlandés que, en su opinión, pueden contribuir a solucionar el conflicto político de Euskal Herria.

Como prime punto, destacaron que en en el norte de Irlanda se ha constatado que el trabajo en común de todas las partes implicadas fue determinante a la hora de superar dificultades. En este contexto, destacaron que los representantes políticos asumieron un liderazgo fruto de un mandato claro de una sociedad que quería superar tantos años de violencia.

En este sentido, Rut Martínez, (PNV) comentó a GARA que en el norte de Irlanda existe una división social similar a la que percibe en Euskal Herria. Allí, entre la comunidad católica y la protestante. No obstante, dentro de esa confrontación destacó el hecho de que haya habido organizaciones y asociaciones, entre ellas de víctimas del Ejército británico y de víctimas del IRA que trabajaron conjuntamente para acabar de manera definitiva con el conflicto.

La segunda conclusión consensuada es la necesidad de afrontar el pasado para construir la convivencia del futuro. Según lo que han vivido durante este viaje en Belfast, abordar con coraje el pasado es «fundamental» para que no repetir los mismos errores.

La sociedad tiene la palabra

La tercera conclusión es la importancia de implicar a toda la sociedad, lo que colocaron como elemento «clave» para solucionar el conflicto político. Como explicaron, en el norte de Irlanda, dar la palabra al pueblo fue y es «la llave» para abordar el futuro.

En este sentido, Maider Carrere (Gazte Abertzaleak) resaltó la importancia que los ex militantes de grupos armados tuvieron en el proceso de paz irlandés. Por ello, se ratificó en la necesidades de la participación de todas las partes implicadas en el proceso en Euskal Herria.

Por otro lado, comentaron que durante este viaje han tenido la oportunidad de convivir y debatir entre ellos, como miembros de distintas sensibilidades políticas dispuestos a escuchar al diferente. Por ello, hacen un llamamiento a todos los representantes políticos vascos para que, siguiendo ese ejemplo, actúen «con la responsabilidad y la altura de miras que el momento exige», pues consideran que ésta es la única vía para solucionar definitivamente el conflicto que vive Euskal Herria.