El Ibex completó la cuarta jornada consecutiva de avances, aunque a última hora se le vio perder intensidad a la subida. En lo que va de semana ha ganado ya un 6,15%. Hoy comenzará desde los 6.438,10 puntos, tras arañar ayer un 0,30%. En Europa, el signo también fue positivo. Londres mejoró un 1,18%, París, un 0,42%, y Fráncfort, un 0,82%. La racha alcista encontró un aliado en la tendencia a la baja de la prima de riesgo, que se veía empujada por la alta demanda de la subasta de deuda. Por lo demás, el gran protagonista fue el pesimismo, dado que Bernanke mostró su creciente preocupación por la crisis europea, a la que adjudicó también responsabilidad en el parón de la economía estadounidense. Además, como desde hace semanas, se asistió a un baile de cifras sobre las necesidades de recapitalización de la banca. En algún caso se han llegado a pronosticar hasta 100.000 millones de euros, una cifra muy alejada de las previsiones del Gobierno Rajoy y la Comisión Europea. Pese a estos nubarrones sobre el sector bancario, dentro del Ibex resaltaron los avances de Santander (+1,66%), BBVA (+1,15%), a los que se asigna suficiente capacidad para cumplir con las nuevas provisiones. Caixbank, por su lado, se apuntó un 2,32%. El color rojo tiñó a Iberdrola (-1,77%), Telefónica (-1,70%) y Repsol (-1,26%). Sin embargo, el peor del selectivo fue Sacyr (-4,44%). Entre los ganadores, destacó Grifols al mejorar un 3,88%, mientras que FCC, BME y Amadeus subieron más de un 2%. En París, las pérdidas fueron encabezadas por Saint Gobain (-5,12%), frente a Vivendi (+3,66%), el mejor de la sesión.