Varios estudios revelan datos sobre la relación entre jóvenes adolescentes e internet
Estudios recientes señalan que siete de cada diez adolescentes se conectan cerca de dos horas diarias a internet, principalmente para escuchar música y conversar con amigos, y que se inician entre los seis y nueve años.
Koldo LANDALUZE | DONOSTIA
Según revela un estudio basado en encuestas realizadas a más de 5.000 estudiantes de entre 12 y 17 años, cuatro de cada diez jóvenes reconoce haber aceptado invitaciones virtuales de desconocidos, sobre todo chicos.
También señala que los jóvenes se conectan todos los días cerca de dos horas, aunque durante el fin de semana aumenta la media del tiempo hasta las tres horas y dejan en un segundo término la búsqueda de información para los trabajos escolares que, según afirman muchos padres, es el motivo principal por el que compran un ordenador personal a sus hijos.
Cuatro de cada diez adolescentes reconocen que les costaría mucho o les molestaría dejar de conectarse a su red social todos los días; una afición que se agudiza sensiblemente más entre ellas que entre ellos.
Tuenti es la red más frecuentada, ya que un 70 por ciento cuenta con un perfil en esta marca; seguido de Facebook, con 6 de cada diez adolescentes suscritos, y de Twitter, con un 30 por ciento de los encuestados.
La gran mayoría de los estudiantes utiliza las redes para chatear con amigos que conocen físicamente, la mitad también las emplea para ver vídeos o fotos de amigos y un 40 por ciento reconoce que ha aceptado las invitaciones virtuales de desconocidos para unirse a su perfil y, de este porcentaje, 3 de cada 10 aseguran que aceptan a todo el mundo.
Esta aceptación indiscriminada se produce en mayor medida entre hombres mayores de 15 a 17 años. Ellas, por su parte, muestran una mayor desconfianza a la hora de aceptar «amistades».
Los encuestados aseguran que conocen los riesgos de posible manipulación que conlleva colgar vídeos y fotos en las redes sociales y, por esta razón, la mitad no realiza esta acción y, de la otra mitad, un 20 por ciento lo hace con algún tipo de protección o medida de seguridad. Otro de los riesgos analizados es la suplantación de la identidad, que han sufrido casi un 17 por ciento de los menores.