EH Bildu pide más explicaciones por borrar interrogatorios denunciados
La respuesta que la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, dio a las preguntas sobre el borrado de las grabaciones de los interrogatorios a los detenidos en la operación del 26 de enero al 2 de febrero de 2010, entre ellos Urtza Alkorta, no han convencido a EH Bildu. En opinión de Julen Arzuaga, contiene contradicciones y actuaciones que se desvían de los protocolos previstos. Pide más explicaciones.
Iñaki IRIONDO |
Tras el arresto de Urtza Alkorta en el puente de Ondarroa, EH Bildu preguntó al Departamento de Seguridad por la destrucción de las grabaciones de los interrogatorios de 2010 tras los que se habían denunciado malos tratos. La consejera Estefanía Beltrán de Heredia confirmó que, efectivamente, las grabaciones se habían borrado, alegando que en los tres meses de garantía de conservación «no había constancia oficial alguna en el Departamento de Interior de denuncias de malos tratos».
EH Bildu sostiene que en la respuesta recibida hay contradicciones y lagunas sobre el cumplimiento de los protocolos de la propia Ertzaintza que es preciso aclarar. Por ello, el parlamentario Julen Arzuaga registró ayer una nueva iniciativa con otras diez preguntas sobre algunas cuestiones relativas al borrado de estas grabaciones.
Fecha del borrado
La primera de las cuestiones es conocer la fecha exacta en la que se procedió al borrado de las grabaciones de los interrogatorios de los detenidos entre el 26 de enero y el 2 de febrero de 2010 en Ondarroa, Mutriku y Gizaburuaga. En concreto, EH Bildu pide que se especifique la fecha exacta del borrado del interrogatorio a Urtza Alkorta, ya que fue una de las denuncias de torturas admitida a trámite y la jueza de Durango pidió precisamente las cintas de sus interrogatorios.
EH Bildu pregunta también al Departamento de Seguridad si se borraron tanto las imágenes del disco duro como las copias de seguridad. Y si ambas destrucciones se hicieron al mismo tiempo.
Es preciso saber que según los protocolos internos de la Ertzaintza, «estas copias se mantienen bajo custodia durante, al menos, 3 meses. Posteriormente son destruidas por el solapamiento de otras imágenes más recientes, salvo que, por cualquier motivo, formen parte de un sumario judicial o tramitación administrativa por Ley de Seguridad Ciudadana, en cuyo caso quedan en custodia indefinida a disposición del juzgado o del órgano instructor competente».
En este contexto, EH Bildu solicita información sobre la capacidad de almacenamiento de los elementos que se utilicen para ello y sobre las nuevas imágenes que hicieron imprescindible el borrado de aquellos interrogatorios denunciados.
Ararteko y querella
Arzuaga recuerda que el Ararteko pidió ver las grabaciones antes de cumplirse el plazo de tres meses y que, según la respuesta de Beltrán de Heredia, el Departamento de Interior se lo impidió, sin remitir siquiera la petición a la Ertzaintza. Le pregunta si considera que fue una actuación adecuada.
Dado que al Ararteko se le negó ver las grabaciones por «existir diligencias previas judiciales», EH Bildu pregunta si esto no es contradictorio con el protocolo que ordena no borrar cintas si pueden formar parte de un sumario.
Igualmente, considera que es contradictorio decir que no hay conocimiento oficial de denuncias de malos tratos cuando estas fueron públicas, tratadas en el Parlamento, y dieron lugar, antes de los tres meses, a una querella del propio consejero de Interior, Rodolfo Ares, contra los autores de aquellas denuncias.
Por último, Julen Arzuaga inquiere a Estefanía Beltrán de Heredia sobre si la conservación de las grabaciones no hubiera ayudado a la Ertzaintza a desmentir las sospechas de malos tratos, en línea con los mecanismos de control puestos en marcha en 2001.
La conservación de las grabaciones de los interrogatorios debería ser, según la Ertzaintza, un elemento de prueba de la inexistencia de malos tratos frente a las denuncias públicas de torturas y de apoyo a la querella interpuesta por el Departamento. Entonces, ¿por qué se borraron?
Al Ararteko se le negó la visión de los vídeos porque había abierta una causa judicial pero luego se borraron aduciendo que no había causa alguna. EH Bildu pregunta a Seguridad si eso no es una contradicción.
El parlamentario Julen Arzuaga acudió ayer al Departamento de Seguridad para conocer el contenido de la instrucción de la Ertzaintza sobre detenciones, que la Consejería había calificado de «confidencial». Después de que GARA revelara que el Gobierno había rechazado remitir al Parlamento protocolos sobre incomunicación y grabaciones que se podían encontrar en Internet y habían sido ya enviados a la Cámara, fuentes de Seguridad puntualizaron a este diario que la instrucción era más amplia y que Arzuaga había pedido una copia de toda ella, por lo que no se le había remitido.
El parlamentario pudo ver ayer esa documentación, aunque sin poder siquiera tener un bolígrafo y papel para tomar apuntes. A la salida confirmó que los documentos que habían provocado su petición de información y que figuraban en un informe del Ararteko son los que ya eran de dominio público.
El resto de la instrucción responde al desarrollo de diversos epígrafes sobre procedimientos e instrucciones específicas del proceso de detención cuyo esquema puede ser consultado también en Internet en la página web de la propia Ertzaintza. I.I.