El portavoz del Ejecutivo de Lakua, Josu Erkoreka, manifestó ayer que hay «escaso margen», no solo para las administraciones autonómicas, sino también para las municipales, para poder «soslayar» la aplicación de la congelación salarial a los funcionarios decretada por el Gobierno español.

En la rueda de prensa celebrada tras el Consejo de Gobierno, de ayer Erkoreka se refirió de esta forma a la congelación salarial de los funcionarios y afirmó que la decisión que finalmente adopte el Ejecutivo se incorporará al proyecto de Presupuestos para 2014.

De este modo, el portavoz del Gobierno no cerró la puerta a la aplicación de esta medida al alegar que hay una «amplísima jurisprudencia dictada por el Tribunal Constitucional para atar en estrecho las retribuciones de los empleados públicos en las comunidades autónomas».

Añadió que la normativa del Estado y la jurisprudencia «no deja margen a la duda de ningún tipo y que incluye algunas sentencias específicas dictadas, por ejemplo, en el caso de Navarra, para quienes podían defender en un caso determinado que el escenario de cumplimiento de las normas básicas del Estado en el ámbito de la función pública pudiera ser soslayado como consecuencia de la autonomía financiera que resulta del Concierto Económico».

En esta línea, indicó que esta jurisprudencia del TC «data de aquella época de los 90 y hay escaso margen ahí para que ninguna administración pública, las autonómicas ni las municipales, puedan apartarse, invocando razones legales, de la congelación establecida por el Estado como norma básica en el proyecto de Presupuestos para 2014, y aseguró que es algo «francamente complicado».

Bizkaia

La Diputación de Bizkaia, por su parte, anunció ayer que analizará si le afecta la congelación del sueldo de los funcionarios recogida en el proyecto de presupuestos. El portavoz foral, Unai Rementeria, señaló que antes de tomar una decisión, es necesario que los servicios jurídicos de la Diputación analicen la ley de presupuestos del Estado para determinar si la congelación salarial de los funcionarios es de «aplicación generalizada» y alcanza a los trabajadores de la administración foral.

Días atrás, el diputado general, José Luis Bilbao, expresó sus discrepancias con la congelación al considerar que los empleados públicos «ya han hecho un esfuerzo» en los últimos años al ver disminuido su poder adquisitivo.