Esta tarde, a las 16.00 en el Leidor Antzokia, el coro I Vilvadini de Catalunya abrirá la competición oficial del Certamen Coral de Tolosa, uno de los cinco grandes concursos corales de Europa, que en el 2013 alcanza su edición número 45.

Esta vez han sido invitados a competir dieciséis grupos procedentes de nueve países diferentes: Alemania, Chequia, Estado español, Estados Unidos, Estonia, Finlandia, Indonesia, Rusia y Suecia, que estarán representados en Tolosa con algunos de sus mejores coros amateurs, colectivos a los que está dirigido el concurso.

Según Luis Miguel Espinosa, director del certamen, la crisis ha motivado una menor presencia de corales de países lejanos, sobre todo latinoamericanos, asiáticos o africanos, que eran asiduos a la cita tolosarra y que, durante un fin de semana, transformaban la localidad en una gran fiesta multicultural del canto. «En todos los concursos de Europa se ha notado el menor número de inscripciones extranjeras«, explica Espinosa. «Especialmente de países como Japón, habituales en los concursos europeos, pero que, con su crisis agravada por el terremoto, llevan un tiempo sin venir por aquí; o de Cuba, a los que siempre había que organizarles alguna pequeña gira para ayudarles a sufragar los gastos, y que ya no es posible hacerlo».

Un recorte presupuestario del 40% ha obligado también a la organización del certamen a aplicar modificaciones a las estructura de la competición, que desde hace unos años alterna bianualmente las modalidades de grupos vocales y coros infantiles en paralelo al concurso central de coros, que se mantiene intacto. Este año le tocará el turno a la competición infantil, favorita del público, que agotó las entradas rápidamente. «Tendremos dos coros infantiles checos, uno ruso, dos que vienen desde Madrid, otro catalán y uno estonio», enumera Espinosa. «Además, uno de ellos, el Coro de Praga, es bien conocido aquí, porque hace unos años ganó el Gran Premio del Certamen».

La selección de los grupos que compiten en Tolosa se realiza por tres vías: la invitación directa a los coros que los organizadores creen que están atravesando un buen momento, porque los han visto en algún otro concurso o festival; también una criba entre las agrupaciones que se inscriben por propia iniciativa; y, por último, la búsqueda en determinadas áreas geográficas, especialmente cuando detectan que en los últimos años no se ha inscrito ningún coro de un país o continente concreto. El fruto de este esfuerzo, realizado a lo largo de todo el año, es un gran escaparate del canto coral internacional, con sus variantes y especificidades en función de la raigambre cultural de cada país

El certamen sirve, además, para que los coros reunidos en Tolosa intercambien músicas y repertorio. Esa es la razón de que la música de algunos compositores vascos, como Javi Busto, se interpreten actualmente en todo el mundo.

«A ese respecto, creo que este año será muy interesante la visita del coro estadounidense, que trae un repertorio muy original», defiende Espinosa. «Últimamente veo que la gente repite demasiado obras y autores, y una de las cosas que tiene que propiciar cualquier concurso es la circulación de la nueva literatura coral. Ofrecer la posibilidad de conocer cosas que normalmente no se escuchan».

La competición, que mueve un importante turismo para la localidad -300 de cada 800 entradas que se venden son para visitantes de fuera de Euskal Herria-, se desarrollará en dos sesiones hoy viernes, a las 16:00 y 19:30 horas; triple sesión el sábado, a las 11.00, 16.00 y 19.30; y la gala de clausura, en la que se dan a conocer los vencedores, que será el domingo a las 11.30, también en el Leidor.

No obstante, la cita con la música coral irá más allá de las fronteras de Tolosa, pues los grupos participantes ofrecerán durante estos días hasta 70 conciertos en otras localidades gipuzcoanas.