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PROYECTO DE PRESUPUESTO DE LA CAV

El TAV se llevará otros 365,3 millones, de los que 97,6 son subidas de precio

La continuación de las obras del Tren de Alta de Velocidad en el tramo guipuzcoano se llevará este año otros 350,7 millones de euros. Esta cantidad supone nada menos que el 66% de lo que el Gobierno de Lakua destina en todo su presupuesto al apartado de «inversiones reales». Cabe destacar además que nada menos que 97,6 millones de euros se destinan al pago de subida de precios. Y eso solo en 2014.

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Iñaki IRIONDO | GASTEIZ

El Departamento de Medio Ambiente y Política Territorial prevé gastar el próximo año 350,7 millones de euros en obras del Tren de Alta Velocidad. Se trata del 66% del total de 531,3 millones que el conjunto del Gobierno tiene previstos para todas las denominadas «inversiones reales». Hay también otra partida de 14,6 millones que Lakua destina también a la «Y vasca»

Además -según el proyecto de presupuestos-, 97,6 millones irán destinados al pago de sobrecostes. En concreto, se recoge una partida de 53 millones para «revisiones de precios» en el tramo Bergara-Ezkio Itsaso; 19 millones para el tramo Ezkio Itsaso-Tolosa; y 25,5 millones para las obras entre Tolosa y Oiartzun.

Pero eso es solo lo que los encarecimientos de precios supondrán en 2014, puesto que el mismo proyecto prevé también que en los próximos años los sobrecostes en esos tres tramos ascenderán a otros 156 millones de euros.

Las obras del TAV se están convirtiendo en un pozo sin fondo. El presupuesto de la obra realizado en 2006 fue de 4.178 millones de euros. Hasta la fecha se han gastado ya 4.615 millones, y todavía no se ha realizado ni la mitad de la obra.

Una «Y» aislada

Las obras del resto del trazado del TAV, responsabilidad del Gobierno español, están prácticamente paradas. Además, las conexiones entre Gasteiz y Burgos y entre Irun y el norte del Bidasoa no están todavía ni siquiera en proyecto. Es decir, Lakua está gastando dinero en una «Y vasca» que quedará aislada por el norte y por el sur.

Por el sur, si el Ministerio de Transportes dejó en 2013 un resquicio de 4,5 millones para estudios del tramo Gasteiz-Burgos, para el próximo ejercicio no contempla ni un euro. Por el norte, el Gobierno de París reseñó el pasado 23 de octubre que el tramo Dax-Hendaia estará finalizado para 2032 pero, por el momento, no hay dotación económica y los trabajos se ciñen a «profundizar los estudios».

«Destruir el Medio Ambiente»

Pese a que el gasto en las obras del Tren de Alta Velocidad suponen el 53,9% del presupuesto total del Departamento de Medio Ambiente y Política Territorial, la consejera del ramo, Ana Oregi, no dedicó demasiado tiempo a la partida durante la presentación de las cuentas que realizó ayer en la Cámara de Gasteiz.

Tampoco los portavoces de los grupos incidieron mucho en ello, a excepción de EH Bildu. Su parlamentaria Marian Beitialarrangoitia criticó que por una parte la partida destinada a «protección del medio ambiente» sea la que ve más reducido su presupuesto, y que la mayor parte del dinero de todo el Departamento se destine precisamente «a destruir el medio ambiente».

Beitialarrangoitia también llamó la atención sobre el hecho de que el Ejecutivo autonómico suele justificar que todos estos millones destinados al TAV se recuperan luego vía Cupo, «algo sobre lo que habría mucho que hablar», comentó. Y es que, según Lakua, Madrid le adeuda cientos de millones por desacuerdos en la liquidación.

Pero la parlamentaria de EH Bildu destacó la existencia de otra partida de 14,6 millones, propia del Ejecutivo autonómico, destinada también a la «Y vasca». Una cantidad con la que «se podrían hacer muchas cosas», según Beitialarrangoitia.

La consejera no quiso entrar en este debate, por entender que se trataba de puntos de vista y no de aclaraciones sobre las partidas presupuestarias.

El TVCP vio demasiada subjetividad en los contratos

El Tribunal Vasco de Cuentas Públicas, en el último informe en el que fiscalizó las obras del TAV, el de 2011, observó la existencia de irregularidades en todas las contrataciones realizadas ese año. El ente fiscalizador critica que en todas estas adjudicaciones resultó determinante la aplicación del «juicio de valor» del contratante, puesto que ninguna de ellas fue la propuesta más barata, y tampoco en los dos casos en los que se aplicaron otras variables en función de fórmulas objetivas, obtuvieron la mejor puntuación en ese apartado. El TVCP sostiene que en todos estos contratos del TAV «no se justifican en los expedientes los criterios de adjudicación para identificar la oferta más ventajosa».

Es decir, el TVCP observa que las contrataciones se realizan con un excesivo grado de subjetividad. Cabe destacar que siendo casi siempre las mismas UTEs las que se presentan a los concursos, los tramos se reparten entre casi todas ellas. No parece que ninguna aprenda a hacer mejor las cosas que el resto. I.I.

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