Sanz atribuye a «CCOO, ELA y LAB» y a «la mano negra abertzale» la situación de VW
Los trabajadores de Volkswagen Navarra viven momentos de tensión. El lunes una publicación alemana aseguraba que la multinacional trasladaría parte de la producción del Polo de la planta de Landaben a otra en Europa del Este. Encima ayer el presidente del Gobierno de Nafarroa, Miguel Sanz, acusaba a «la mano negra de los abertzales», por una parte, y a los sindicatos CCOO, ELA y LAB, por otra, de hacer «inviable la firma de un convenio y un acuerdo» en Volkswagen. El caso es que el sindicato ELA ni siquiera forma parte del comité de empresa de la factoría navarra.
IRUÑEA
El presidente del Gobierno de Nafarroa, Miguel Sanz, culpó ayer a los sindicatos de Volkswagen Navarra de la situación que vive la factoría tras 15 meses de negociación para firmar el convenio colectivo.Sanz, en declaraciones realizadas a la cadena Ser, aseguró que «existe una estrategia sindical de intentar mediatizar y si no condicionar, por no decir romper, lo que ha sido una actuación loable, la unidad sindical entre UGT y CCOO». Pero el líder de UPN fue más allá y acusó a «la mano negra de los abertzales» de la situación actual, añadiendo que «no entiendo la actitud de CCOO, que conjuntamente con los sindicatos ELA y LAB, ha hecho inviable la firma de un convenio y un acuerdo y ha traído estas consecuencias». Cabe destacar que ELAno forma parte del comité. Sanz sólo tuvo buenas palabras para el sindicato UGT, calificando su actitud de «ejemplar», puesto que se muestra partidario a firmar la propuesta de la dirección. Y es que la información publicada el lunes en un periódico alemán, que aseguraba que la multinacional va a trasladar parte de la producción delPolo a Europa del Este, está causando estragos entre los miembros del Gobierno de Nafarroa, a pesar de que el comité todavía no ha recibido ninguna notificación oficial de la noticia. Así el consejero de Industria, José Javier Armendáriz, y el delegado del Gobierno español, Vicente Ripa, mostraron su «gran preocupación» ante la noticia del traslado. «Parece que sobre ese plazo por el el 7 de abril y sus consecuencias negativas, los únicos que nos lo hemos creído hemos sido el gobierno», indicó Armendáriz. Ante estas declaraciones, CCOO aclaró ayer que «lamenta que MiguelSanz trate de eludir sus responsabilidades» y «pretenda trasladarlas a los trabajadores y sus representantes». El sindicato señaló que el convenio que está defendiendo es «lo decidido por la plantilla en referéndum», es decir la propuesta de UGT, CCOO y CC, y lamentó «el profundo desconocimiento que muestra el presidente del gobierno sobre los convenios del sector y sobre aquello que CCOO firma o deja de firmar». El sindicato señaló que es «absolutamente falso que lo propuesto por VW Navarra sea lo mejor del sector», algo que Sanz aseguró ayer y que la empresa lleva diciendo desde un principio, y aseguró que ya en 2002 los trabajadores de Landaben firmaron una reducción del 10% del salario, «algo que no se ha hecho en ninguna empresa del sector enEspaña». La Federación delMetal de LAB, por su parte, también quiso responder a las declaraciones de Sanz asegurando que éstas «ponen de relieve la ceguera política y la ignorancia» del presidente navarro. «Ignorancia, porque con sus declaraciones ha demostrado no conocer siquiera qué sindicatos componen y cuáles no el comité de VW Navarra», añadieron.
La plantilla secunda los paros
En medio del revuelo que formaron ayer las declaraciones de Sanz, la plantilla de VW continuó «como hasta el momento», es decir, «secundando de forma mayoritaria», según Benito Uterga delegado de LAB en la planta, la convocatoria de CCOO, LAB y CGT de dos horas de paros por turno. El motivo de la convocatoria era «la exigencia de negociación a la dirección de la empresa y la defensa de la plataforma presentada por la representación de los trabajadores a la dirección para la negociación del convenio». Asimismo, acordaron continuar con las movilizaciones, aunque las concretarán hoy. Los próximos paros de momento serán los de mañana, para protestar por los nueve despidos por motivos de salud. UGT también secundará estos paros parciales.
Piden que Nafarroa no dependa de las multinacionales
R.C.
IRUÑEA A pesar de que tal y como repiten una y otra vez los sindicatos de Volkswagen éste sea «un asunto laboral», las declaraciones de Sanz no han dejado indiferente a nadie y no son pocos los partidos políticos que han pedido al gobierno un plan industrial propio para Nafarroa para que así no dependa de las multinacionales. Batasuna aclaró que «el anuncio de traslado de la producción es una clara amenaza inaceptable que la multinacional hace gracias a la cobertura política que le ofrece la derecha» y la política de UPN-CDN «han puesto a Navarra y a la Hacienda Foral al servicio de las multinacionales sin ni siquiera exigirles a cambio compromisos en clave de inversión, mantenimiento de puestos de trabajo o fomento de la economía local». El secretario general de PSN, Carlos Chivite, consideró que «no es el momento ni de achacar responsabilidades ni de buscar culpables, sino de plantear, proponer, negociar y acordar soluciones entre las partes afectadas que al menos son tres: la dirección, los trabajadores y el Gobierno Foral». Chivite añadió que su partido aspira a una Navarra con VW y también «con un sistema económico complementario». El PNV, de mano de su presidente en Nafarroa, José Angel Agirrebengoa, señaló que está dispuesto a apoyar al Gobierno de Nafarroa en el impulso de un plan de promoción industrial y de apoyo al empresariado endógeno, «algo que venimos pidiendo hace años cómo único sistema para reducir la dependencia de las multinacionales». Nueva propuesta de calendario del comité
El comité se reunió con la dirección en la jornada de ayer para presentarle un nuevo calendario laboral. Este planteamiento sitúa tanto la jornada industrial como las vacaciones en 213 días al año «en función de lo que marca el convenio». Asimismo, el comité aclaró que de esta manera se podrían producir 235.000 coches anuales cuando el último programa oficial situaba la producción en 225.700 coches al año. -
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