DONOSTIA
Han transcurrido ya más de cinco meses desde que comenzara en Madrid la vista por el macrosumario 18/98. Un periodo de tiempo en el que han prestado declaración los imputados. No todos, puesto que Jokin Gorostidi, cuya comparecencia estaba prevista para el lunes, falleció anteayer tras sufrir un infarto el viernes de la semana pasada. Su recuerdo marcó la comparecencia celebrada ayer en Donostia para hacer balance de lo acontecido hasta la fecha en torno a este juicio. Mikel Korta reseñó que en estos meses «se ha confirmado lo que veníamos diciendo desde el principio, que éste es un juicio totalmente político».
En este sentido, indicó que «no se juzgan delitos, sino a personas y organizaciones que luchan y trabajan por la libertad de EuskalHerria». Korta aseguró sin embargo que «la represión no conseguirá detener el proceso abierto en favor de la libertad. Nosotros seguiremos trabajando, con o sin represión».
Otro de los aspectos que destacó fue que en el transcurso de las sesiones se ha conseguido llevar hasta la sede judicial «las reivindicaciones de Euskal Herria» y se han denunciado vulneraciones de derechos como «la tortura o la opresión que sufre el euskara».
A renglón seguido, Teresa Toda pasó a explicar cuál ha sido la actitud de los jueces. «Anteriormente ya se ha hablado de los muchos errores judiciales acaecidos durante estos largos cinco meses». Una circunstancia que, en su opinión, demuestra que «no les importa cómo hacerlo, sólo les interesa continuar de la manera que sea».
Toda tildó de «castigos» algunas de las decisiones adoptadas por el tribunal que preside la magistrada Angela Murillo. «Nos obliga a todos y todas a acudir semanalmente a Madrid, con el gran desgaste físico y síquico que ello está causando. Algunas personas han perdido su puesto de trabajo, otras están en unas situaciones muy especialesŠ Los problemas de salud han comenzado a aflorar», enumeró.
«No nos dejan ni hablar»
Ello al margen de lo que acontece una vez dentro de la sede de la Audiencia Nacional, donde «existe una situación de desprecio, el tribunal no nos respeta como personas. Nos quitan la palabra y no nos dejan ni hablar libremente para poder defendernos».Teresa Toda denunció asimismo la actitud de los jueces respecto a los problemas de salud de algunos encausados, siendo el último caso el de Jokin Gorostidi. «El lunes tuvimos que escuchar cómo sentían la situación de Jokin. Para nosotros no es más que hipocresía, ya que Jokin ha fallecido debido a las condiciones impuestas por el propio tribunal».
La portavoz de los enjuiciados dedicó otro capítulo a la postura de los magistrados en torno a la situación de EuskalHerria. «El tribunal no quiere saber nada, no conoce a la sociedad vasca, no sabe cuál es el problema de Euskal Herria... Escuchan con total indiferencia lo que decimos».
Como contrapunto, Toda se congratuló por las movilizaciones y por el respaldo de la sociedad vasca. Una actuación que no se ha visto reflejada en el plano institucional, donde «hemos escuchado bonitas palabras, pero no han llegado a pasar a hechos concretos».
En la parte final, Mikel Korta retomó la palabra para subrayar que «este juicio tiene, en la actual situación, menos sentido que nunca. Reclamamos su suspensión, tal y como venimos haciendo desde 1998. Sólo hace falta voluntad, ya hemos visto en otros casos que si quieren pueden». Y fue más lejos al solicitar la disolución de la Audiencia Nacional, un tribunal que presentó como «heredero del TOP franquista».
Korta destacó que se está utilizando en muchas ocasiones la palabra «circo» para definir este proceso, pero recordó que «es un circo que lleva años funcionando y condenando a la cárcel a miles de ciudadanos vascos». Por ello, pidió a la ciudadanía de Euskal Herria que permanezca «alerta» y continúe tomando parte en las movilizaciones que se convoquen próximamente.
«Ha sido un honor sentarnos en el banquillo con
Jokin»
Mikel Korta, en nombre de los encausados en el 18/98, subrayó que «ha sido un honor sentarnos en el banquillo de los imputados con una persona y un militante como Jokin Gorostidi porque, además, ser juzgado en la Audiencia Nacional por luchar por Euskal Herria es un honor para cualquier vasco». Por ello, llamó a participar en todos los actos que se lleven a cabo en su recuerdo. -