Pablo PRIGIONI | Base del Baskonia
«Muchos pensamos que Moscú sería nuestra última Final Four»
Pablo Prigioni se ha destapado esta temporada como uno de los mejores bases de Europa está nominado para el quinteto ideal batiendo el récord de asistencias del torneo y es quizá el mejor termómetro para calibrar las opciones del Baskonia, porque para poder ganar al Maccabi y a cualquiera el equipo necesita al mejor Prigioni.
Desde la histórica importancia del base en el Baskonia, Pablo Prigioni ha explotado esta temporada en lo personal y es uno de los líderes de un equipo que sueña con el título continental.
¿Cómo afrontan los días previos a la Final Four?
Intentando poner la cabeza en los entrenamientos porque son situaciones atípicas, con toda la gente detrás que es algo normal en una situación así. Estamos deseando que llegue el partido lo antes posible, sobre todo marcharnos de Vitoria. En cuanto te subes al avión ya estás medio metido en el tema.
¿Cómo cree que llega el equipo respecto al año pasado?
Llegamos más o menos en la misma situación, con las mismas oportunidades. El año pasado llegamos para jugar ante el gran favorito que jugaba en casa, y habíamos perdido cuatro veces seguidas ante ellos. Este año vamos a jugar otra vez ante el favorito, pero tenemos plena confianza en el equipo.
Este año, sin embargo, ya no van como novatos...
No, pero creo que la alegría es como si lo fuéramos. El año pasado, cuando volvíamos de Moscú, muchos pensábamos que podía ser la única que jugáramos porque es tan difícil llegar, sobre todo para nosotros. Por repetir puede parece fácil, pero no nos imaginábamos poder estar en ésta y por eso, la alegría es como si fuera nuestra primera Final Four.
La semifinal de este año es la repetición de la final del año pasado. ¿Hay ánimo de revancha?
No, porque el año pasado perdimos ante un gran equipo que ya llevaba un par de años jugando muy bien. Nos ganaron bien. Si te ganan jugando mal y tú lo haces peor, sí que te queda un mal sabor pero cuando pierdes ante un equipo que te gana bien no hay nada que objetar.
Muchos dicen que, con la marcha de Jasikevicius, las diferencias entre ambos equipos se han acortado y que la balanza está más nivelada.
Nosotros estamos con las mismas oportunidades que el año pasado porque hemos perdido jugadores importantes y un entrenador importante. No veo que hayamos subido. En cuanto a ellos, han llegado bastante bien a la Final Four. Han perdido a un jugador importante pero han ganado a otro que quizá no les da tanta claridad en ataque, es más anotador e individualista, pero les da mucha intensidad defensiva. Es un jugador que presiona en todo el campo y creo que lo que han perdido por un lado lo han ganado por otro. Creo que el equipo sigue siendo el gran candidato, sobre todo porque saben cómo ganar una Final Four. De los cuatro equipos, son los únicos que saben ganarla; CSKA lleva años sin poder conseguirla, el Barcelona es un equipo nuevo y nosotros no hemos ganado ninguna.
¿Qué hay qué cambiar entonces del año pasado para poder ganarles?
No hay que hacer nada raro. Hay que hacer lo que hacemos todos los días, con la máxima concentración y rapidez. Está todo inventado, sólo queda salir mentalmente muy duros, saber que vas a jugar ante un equipo que tiene mucha experiencia y recursos. Va a haber momentos del partido muy duros, que vas a estar abajo, que parece que se te hace de noche... pueden pasar mil cosas y debemos estar preparados para ello. Nosotros no sabemos cómo ganarles porque no le hemos hecho nunca. Lo que sí tenemos es confianza en nuestro juego, en que el viernes estemos todos en nuestro techo a nivel individual y, sobre todo, como conjunto, que podamos ser el mejor equipo posible porque si no, no tendremos opciones de nada.
Por lo menos parece que se crecen en los momentos importantes...
Hemos tenido picos durante la temporada, uno de ellos fue en la Copa, otro fue en Atenas y ojalá el equipo dé, como mínimo, ese nivel. Aún así, mostrando un nivel alto como el de Grecia ganamos por muy poca diferencia. Necesitamos ese nivel para competir aunque, aún así, puedes hacer un gran partido y perder por uno.
El equipo depende mucho de que usted esté acertado ¿Cómo se encuentra?
Yo estoy bien, creo que estoy como todos los compañeros. Hemos tenido tiempo para descansar y para entrenar, creo que vamos a llegar bien al viernes. Creo que necesitamos de todos, porque si quieres ganar la Final Tour tienes que ganar dos partidos y un jugador no puede jugar 80 minutos, porque bajará su nivel. Cada uno debe dar el máximo independientemente del tiempo que juegue.
Está nominado para el quinteto ideal del torneo...
Esa es una satisfacción muy pequeña con lo que puede llegar a ser el título. Ganar sólo el primer partido supera cualquier premio individual que pueda tener cualquier jugador.
La continuidad de este año le ha servido para destapar su juego y asumir responsabilidades
El año pasado tuve un montón de problemas físicos con una lesión de rodilla. Este año era importante para mí, de regreso tras la lesión y la operación, tras trabajar todo el verano en la rehabilitación. La marcha de Calderón dejó un gran hueco, y yo quise hacer todo lo posible para guiar al equipo, para mantener el nivel. Mi reto era justamente ese, hacerlo lo mejor posible como titular y cumplir las expectativas que demanda la tradición de este equipo en los últimos años. Era una cuestión de responsabilidad, sin duda, y estoy satisfecho de cómo ha transcurrido la temporada, aunque los momentos decisivos están aún por llegar. -
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