GASTEIZ
Un estudio de Azti-Tecnalia sobre la situación de la pesquería de la anchoa constata que esta especie se encuentra en «grave riesgo de colapso» desde 2005, cuando la UniónEuropea estableció por primera vez la prohibición de pescar anchoa.
Los resultados de la campaña desarrollada por Azti en mayo confirman que la anchoa continúa en situación de «grave riesgo», al situarse su biomasa por debajo del límite, lo que significa un «peligro de colapso», por la disminución de su capacidad reproductiva.
En 2006, los arrantzales de Bizkaia y Gipuzkoa han capturado hasta el momento 720 toneladas, lo que, según Rogelio Pozo, director general de Azti, supone «el segundo peor registro de la historia, sólo superado por las capturas del año anterior», lo que provocó el cierre de la pesquería. Esta cifra contrasta con las 4.500 toneladas de capturas medias.
La investigación ha puesto de manifiesto la necesidad de proteger el stock hasta constatar la recuperación del recurso por encima de los niveles de precaución, por lo que, según indicó Pozo, «el consejo científico pide que la incidencia de la pesca en el recurso sea nula hasta que un nuevo dictamen científico» que lo certifique.
El consejero de Agricultura y Pesca del Gobierno de Lakua, Gonzalo Sáenz de Samaniego, consideró «urgente» el cierre de la pesquería al estimarse que el stock de la especie puede estar en la actualidad, según los datos del informe Bioman 2006, en unas 20.300 toneladas, por debajo de la biomasa que se considera como límite. En este sentido, apeló a la aplicación «de forma inmediata» del acuerdo del Consejo de Ministros de Pesca de la UE de diciembre que «estableció que si en primavera el nivel de biomasa de la anchoa estaba por debajo de 28.000 toneladas se procedería al cierre inmediato de la pesquería».
A su juicio, el levantamiento de la prohibición fue «un claro ejemplo de dejación de responsabilidad en la gestión para la consecución de una pesquería biológicamente sostenible».
En su opinión, no se está dando una gestión adecuada y exigió que las decisiones de las administraciones y del sector pesquero se basen en criterios científicos para garantizar la recuperación de la especie.
Azti prevé realizar un nuevo estudio sobre la evolución de esta pesquería en otoño.
Representantes de las cofradías se reunirán el lunes con el Departamento de Pesca de Lakua para consensuar una «opinión conjunta» para la defensa del cierre de la costera de cara al encuentro que el día 31 mantendrán en Madrid con el Ministerio español de Pesca.
GARA
BILBO
LAB y Batasuna coincidieron ayer en reclamar un plan de emergencia y de «choque» para la pesquería de la anchoa y el relanzamiento sectorial, que abarque todos los campos para el mantenimiento de la especie a largo plazo.
El sindicato denunció que el sector se encuentra en una situación «dramática», debido a la «inoperancia» y el «abandono» por parte de las distintas administraciones. Exigió un plan consensuado por todas las partes implicadas que haga posible una gestión de los recursos que reparta los derechos de pesca, establezca vías de comercialización mediante la asignación de «label», prime la producción propia y desarrolle un marco de relaciones laborales y de protección social que permita a los arrantzales disponer de condiciones de vida dignas y estabilidad real. Consideró «injustificable» la ausencia de una política pesquera que garantice la actividad de los subsectores que ejercen en los puertos vascos.
Tanto LAB como Batasuna criticaron la reapertura la pesquería y criticaron al Gobierno de Lakua por responsabilizar a Bruselas y Madrid y no asumir sus respon- sabilidades, sabiendo las consecuencias que acarrearía esa decisión. Batasuna censuró su actitud «sumisa y claudicante» y su «nula voluntad política» para realizar una política pesquera propia «acorde a nuestras necesidades».