La Diputación de Gipuzkoa toma la «Y vasca» como «una oportunidad de oro»
Tras la reunión que mantuvieron el pasado martes la consejera de Transportes de Lakua, Nuria López de Guereñu, y el diputado general de Gipuzkoa, Joxe Joan González de Txabarri, para intercambiar informaciones acerca del nuevo trazado de la «Y vasca», la Diputación de Gipuzkoa afirmó ayer que «comparte al 100% los criterios del Gobierno» para el trazado guipuzcoano. Además, dio a conocer sus representantes en las comisiones de la «Y vasca».
DONOSTIA
La Diputación de Gipuzkoa señaló ayer que «comparte al 100% los criterios que plantea el Gobierno vasco» para el trazado en esa provincia de la red ferroviaria conocida como «Y vasca».El portavoz de la Diputación de Gipuzkoa, Koldo Azkoitia, negó rotundamente en una rueda de prensa ofrecida ayer en Donostia que dicha infraestructura sea «en absoluto» una amenaza, «sino todo lo contrario». La comparecencia de Azkoitia tuvo lugar tras la reunión mantenida el martes entre Nuria López de Guereñu y Joxe Joan González Txabarri para intercambiar informaciones y analizar las alternativas que se manejan para su conexión con Nafarroa, reunión que según denunció Batasuna, «demuestra a las claras» que la «voluntad real del PNV» es «comenzar las obras como sea, esto es, deprisa y corriendo, aun cuando todavía no se tenga claro cuál va a ser el trazado definitivo». Azkoitia opinó que, la de la «Y vasca» es «una oportunidad de oro para construir país», ya que contribuirá al desarrollo de la ordenación territorial en Gipuzkoa, potenciará el transporte público y supondrá un «potente motor de la economía guipuzcoana».
«Ventajas» del TAV
El portavoz de la Diputación destacó que con el TAV «se crearán cuatro nudos de conexión» en Gipuzkoa, concretamente en Irun, Astigarraga, Donostia y Ezkio-Itsaso. Además, apuntó la «oportunidad única» para vertebrar Hego Euskal Herria «uniendo las cuatro capitales por tren». Azkoitia destacó también la potenciación del transporte público de carácter social y sostenido que posibilitará esta infraestructura «porque transportará mercancías y pasajeros, sacará mercancías de la carretera y permitirá reordenar tráficos a este nivel haciendo posible combinar diferentes modos de transporte».Azkoitia opinó, contradiciendo las afirmaciones de Batasuna en las que aseguraba que el proyecto es «un auténtico derroche de dinero público», que en el ámbito económico también supone una ventaja el corredor del tren de alta velocidad, ya que «del dinero que se paga a Madrid vía cupo, en el caso del TAV por encima de los 1.400 millones de euros, se van a reinvertir en Gipuzkoa convirtiendo la inversión pública en un potente motor de la economía guipuzcoana». Azkoitia avanzó, asimismo, que se gestionarán 200 hectá-reas que «formarán parte de un banco de terrenos destinados a reordenar el agro guipuzcoano y a paliar las incidencias de una infraestructura de este calibre, a pesar de discurrir en un 60% de su trazado en soterrado». Cabe destacar que son estas incidencias precisamente, las que varios grupos, colectivos y partidos han denunciado a lo largo de todo el camino recorrido por el proyecto de la «Y vasca», más ahora que, tal y como denunciaba Batasuna, pretenden «destrozar dos de los pocos parques y reservas naturales que tenemos en el país». Por otro lado, Azkoitia señaló que la Diputación de Gipuzkoa ya ha nombrado a sus representantes para las primeras comisiones creadas en relación al TAV. Adelantó que éstas serán Imanol Agote (director general de Cultura), para el apartado de «la gestión del 1% cultural de la obra pública»; Rafael Uribarren (diputado de Medio Ambiente), para «la gestión de la reordenación del agro y las afecciones que puedan existir en el entorno», y él mismo para «la gestión de suelos».
Sin cobertura ferroviaria
Por su parte, Aralar ha denunciado que, tras la eliminación de la línea de Talgo Madrid-Irun con parada en Altsasu, los 25.000 habitantes de Sakana se han quedado sin cobertura ferroviaria. En una nota, critica el hecho de que «cuando estamos inmersos en un debate sobre las nuevas infraestructuras ferroviarias y la apuesta sobre el servicio que el tren debe prestar en sustitución de la carretera, las actuaciones de Renfe y del Gobierno de Madrid se toman en el sentido contrario».
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