KABUL
El Ejército estadounidense, con la ayuda de sus aliados locales y occidentales, anunció que lleva a cabo su más grande ofensiva desde la retirada talibán en 2001.La operación, bautizada como «Asalto a la Montaña (Mountain Thrust)», tiene como objetivo el sur de Afganistán, escenario de una creciente ofensiva de la guerrilla talibán, que ha provocado los enfrentamientos más cruentos desde «el final de la guerra».
La ofensiva estadounidense, que cuenta con la participación de 11.000 soldados aliados y un número no precisado de milicianos afganos, comenzó a mediados de mayo pero se habría mantenido en secreto.
El mando militar de EEUU situó la muerte de «medio millar de talibanes» ayer anunció haber matado a varias decenas en el contexto de la primera fase de «preparación del terreno» y que se habría desarrollado en las provincias más septentrionales del sur.
«Ayuda humanitaria»
El coronel Tom Collins anunció un doble objetivo: «barrer los refugios de las fuerzas enemigas bloqueando sus vías de comunicación y realizar proyectos de reconstrucción y de ayuda humanitaria».Peculiar visión de la «ayuda humanitaria», que hará que la resistencia marque y castigue como enemigo a toda organización civil que llegue luego bajo esa bandera.
La guerrilla talibán, cada vez más audaz y que ha mostrado su capacidad para controlar distritos enteros del sur de Afganistán, cuenta con 12.000 efectivos en el sur, una vasta región en la que el presidente del régimen de Kabul, Hamid Karzai, es visto como el líder de la corrupción.