Bastida acoge una marcha contra un campo de golf en la zona de San Ginés
«Ez, ez, ez, golf zelairik ez!». Profiriendo éste y otros gritos recorrieron ayer las calles de Bastida cerca de 400 personas. Pretendían así mostrar su frontal rechazo al proyecto que planea la construcción de un campo de golf de 18 hoyos y un gran complejo urbanístico, con unas 800 viviendas, en la zona de San Ginés. La convocatoria, lanzada desde la plataforma Torrolate, también tuvo su punto lúdico en el hamarretako que se celebró en el parque del mismo nombre.
BASTIDA
La construcción de un campo de golf y un gran complejo urbanístico preocupa en Bastida, hasta el punto de que alrededor de 400 personas, de toda edad y condición, respondieron ayer a la convocatoria realizada desde la plataforma para la defensa y conservación de Toloño y su entorno, Torrolate, para mostrar su frontal oposición a este proyecto. El sencillo programa elaborado comenzó a media mañana en el parque de San Ginés, zona de esparcimiento que se verá seriamente afectada. Bastidarras y personas de otros lugares de Euskal Herria que veranean en el municipio llegaron provistos de todo tipo de productos para degustar un buen hamarrateko. Mientras algunos se conformaban con un bocadillo, otros muchos cargaban con neveras, repletas de bebida y tortillas de patata preparadas previamente en casa. Mientras llegaba la hora de partida, cada uno se entretenía como podía. Desde jugar a fútbol a refrescarse en una de las numerosas fuentes del parque, tumbarse bajo una buena sombra o comprar una camiseta de la plataforma. A las 13.00 se inició la marcha hacia el pueblo, bajo el lema “Por Labastida, Golf zelairik ez”. Media hora después de andadura entre viñedos, los manifestantes llegaron al Arco de Toloño. El resto de recorrido previsto por las calles de la localidad tuvo que ser modificado, debido al retraso de una actuación teatral en la plaza en la que debía concluir la movilización. Fue entonces cuando se empezaron a escuchar los primeros gritos del tipo de “Ez, ez, ez, golf zelairik ez!”, “Labastida no es Marbella”, “Hemen gaude Bastidaren alde” o “A mí el proyecto no me molaría ni con el sueldo de alcaldía”.
«Imposición» del Consistorio
Antes de dar por concluida la marcha, Orlando Arreitunandia leyó un manifiesto en nombre de la plataforma. Recordó que «somos muchos los bastidarras que no tragamos el señuelo del “Golf and Wine”, nombre del polémico proyecto, y que, por lo tanto, no vamos a permitir que el Ayuntamiento continúe por el camino de la imposición». También dijo que «estamos aquí para decir que no queremos un campo de golf en las faldas de Toloño ni que se urbanice en línea recta hacia San Ginés». Además, acusó al Consistorio de «despreciar la opinión de más de mil personas que no nos conformamos con promesas falsas», porque las alegaciones presentadas por Torrolate «ni siquiera las han tenido en cuenta y, de momento, las han dejado sin responder». Así, insistió en la necesidad de «discutir» si es razonable que el Consistorio «regale»terrenos municipales a inversores privados «a través de una sociedad fantasma», si «está justificada» la revisión de las Normas Subsidiarias, y si «legalmente» es posible la «masiva» recalificación que se plantea después de que el alcalde, Iñaki Gil Orive (PP), «haya intervenido personalmente en compraventas de las fincas que se van a recalificar». La plataforma dudó sobre si la ubicación elegida es «compatible» con la protección del suelo y los recursos naturales y si el conjunto de la operación es «viable» en términos técnicos y financieros. Exigió al Ayuntamiento que cumpla la «única obligación que le impone» el PTP de Rioja Alavesa, consistente en la elaboración de un Plan Especial para San Ginés. Arreitunandia concluyó advirtiendo que, aunque le pese, «en Torrolate no nos damos por vencidos, que sepan que sus desplantes nos fortalecen».
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